Aunque el agua de nuestros hogares sea potable, contiene muchas sustancias químicas que son perjudiciales para nuestra salud y belleza. El cloro, es uno de los componentes más utilizados en los procesos de potabilización del agua pero se considera un producto agresivo para nuestra piel y cabello.
El cloro afecta considerablemente a los aceites y proteínas de la piel, generando sequedad, debido a la pérdida de humedad y elasticidad natural. Además, en casos de pieles sensibles o alergias, puede llegar a provocar mucha irritación en la piel. Al tomar duchas de agua caliente, los poros de la piel se abren, tornándose más propensos a absorber los químicos que el agua contiene, como cloro, amoniaco o incluso metales pesados, que son perjudiciales para la salud. Además, al vaporizarse, inhalamos vapores clorados y otros componentes químicos que pueden llegar a ser tóxicos para el ser humano.
También los químicos que contiene el agua del grifo eliminan los aceites naturales del cabello, secándolo y dejándolo sin brillo, además de generando más frizz. Además, debilita el color en los cabellos teñidos. Se cree que incluso que, si el agua está demasiado contaminada por sustancias químicas, puede colaborar en la caída paulatina del cabello.
Usar duchas con filtro de carbón activo, puede evitar la sequedad de la piel y el cabello, además de mejorar el rendimiento de los jabones y champús que utilizamos diariamente, al no tomar contacto con químicos existentes en el agua. Está especialmente indicada para personas con cabello seco, con problemas de pérdida de cabello, personas con piel seca o alergias y con tendencia a desarrollar líneas de expresión y arrugas. Pero en general, elegir una ducha con filtro de carbón activo es una buena opción para todas las personas, pues aporta un plus a tu salud a largo plazo.
Usar una ducha con filtro de carbón activo permiten mantener los aceites naturales del cabello, aportándole suavidad y brillo y reduciendo el frizz. Además, en el caso de cabellos teñidos, se conserva su color por más tiempo, sin que degrade a tonalidades apagadas y sin brillo. También, influye en la disminución de la caída del cabello, manteniéndolo hidratado y con su fuerza y volumen naturales.
Además, la piel se siente más suave e hidratada debido a que se conservan mucho mejor los aceites naturales y proteínas de la piel. Mejora el cutis, ya que no se absorben tantas impurezas al tomar una ducha, y las pieles sensibles se alivian considerablemente, debido a que la humectación óptima hidrata adecuadamente la piel, sin sequedad incómoda y otras afecciones. La mejora de hidratación que aportan las duchas con filtro de carbón activo, aumenta la elasticidad natural de la piel, por lo que disminuye y se previene las arrugas.
Al contribuir a una mejora de la salud de la piel, aumenta la capacidad natural de la piel para hacer frente a síntomas alérgicos, por lo que las personas con alergias en la piel se ven muy favorecidas cuando usan duchas de carbón activo.
Asimismo, evitar inhalar vapores con químicos en la ducha gracias a los filtros de carbón, reduce la posibilidad de contraer enfermedades respiratorias como el asma, la bronquitis o la pulmonía.
También te puede interesar Duchas con filtro de carbón activo: libre de cloro y metales pesados y La nueva plancha en frío que no estropea tu cabello
