El 80% de los maltratadores tiene trastorno de personalidad. Suelen ser controladores, manipuladores, perfeccionistas y con una conducta irritable y temerosa al fracaso y a la desaprobación social. Son algunas de las líneas que, según el estudio realizado por el Instituto de Psicología Jurídica y Forense, dibujan el perfil del maltratador. Un estudio que sienta las bases de una nueva línea de investigación y que indaga en los comportamientos de la persona maltratadora. Cuanto más grave es el trastorno, más acentuado es el maltrato que ejercen hacia su pareja. Maltrato que, en lo que va de año, se ha traducido en cifras tan negras como 54 víctimas mortales.
El último estudio sobre violencia de género realizado por el Instituto de Psicología Jurídica y Forense indaga en la personalidad y el comportamiento de 217 maltratadores. Un estudio que desvela que el 80% de los maltratadores sufre un trastorno de personalidad, un problema que lleva a ejercer una violencia física y psíquica sobre su pareja, incluso a justificar sus actos. Perfeccionista, impulsivo, controlador, hiperexigente, incapaz de mostrar sus sentimientos y excesivamente irritable son algunas de las características principales que presentan los maltratadores con trastorno de personalidad. Un estudio que permite indagar no solo en el comportamiento, sino en las pautas sobre las que trabajar para conseguir su rehabilitación o, al menos, el control de sus actos.
La violencia de género, cuyo Día Internacional acabamos de celebrar recientemente, sigue siendo un problema social de primer orden, pero en el cual, como constata este estudio realizado en colaboración con la Universidad Pública de Navarra, también hay que tener en cuenta factores médicos, psiquiátricos y psicopatológicos.
Otros datos interesantes que ha arrojado este estudio es que la edad media de los maltratadores no supera los 36 años, siendo el porcentaje de hombres violentos extranjeros similar al de los nacionales. El nivel cultural influye, ya que la mayoría solo tienen estudios primarios (más del 64%), frente a un 5% con estudios universitarios. Más del 30% no tiene trabajo y la mayoría, el 60%, tiene hijos.
Solo un 20% de los que participaron en el estudio no presentaron ningún tipo de trastorno, frente a un 80% que sí lo hicieron, siendo el trastorno de personalidad el más frecuente y que, en la mayoría de las ocasiones, llega acompañado de una actitud obsesiva compulsiva, un trastorno de dependencia o una personalidad narcisista. A esto que sumarle, capítulos de ansiedad y abuso de alcohol y drogas en muchos casos.
Predecir o anticiparse a un comportamiento violencia o de maltrato hacia la pareja no es fácil, pero sí se puede estar alerta a las primeras señales sobre un posible trastorno de personalidad, sobre todo entre los jóvenes, los menores de treinta años, grupo que constituye el 30% de los agresores, lo que ha llevado a los especialistas a dar la voz de alarma sobre la educación y los valores que están recibiendo las futuras generaciones.
Los hombres que han participado en este estudio han formado parte del programa de intervención con maltratadores que, desde el año 2005, desarrolla el Servicio Social de Justicia de Navarra. Un programa terapéutico al que acceden de manera voluntaria. Un programa con una duración media de 1-2 años y con una tasa de éxito que ronda el 45%.
