Molestias en la lengua: causas más comunes

Las molestias en la lengua pueden deberse a múltiples causas. La lengua, aunque no siempre le prestamos la debida atención, es un órgano vital. Un órgano formado por un conjunto de músculos que, entre otras funciones, nos permite saborear y deglutir los alimentos, hablar, e, incluso, respirar. Funciones esenciales que justifican los debidos cuidados de la lengua para evitar incómodas molestias.

Cualquier cambio en la apariencia normal de la lengua o síntomas como ardor o dolor no deben ser subestimados, ya que también pueden ser indicativos de otro problema de salud, como por ejemplo anemia o déficit nutricional de vitaminas. De igual manera, como medida preventiva, hay que examinar todos los días la lengua aprovechando el momento del cepillado de dientes.

Causas de molestias en la lengua

Tomar algo muy caliente o moderse la lengua de manera involuntaria al masticar son dos de las molestias más frecuentes, pero no son los únicos motivos que pueden llevarnos a notar la lengua dolorida.

La glositis causa inflamación de la lengua y cambios en su color o textura. También puede venir acompañada de ardor, dolor, dificultades para tragar y hablar con normalidad.

Las reacciones alérgicas a determinados alimentos o sustancias irritantes se incluyen también entre las causas más comunes de molestias en la lengua. También puede ser un síntoma de la enfermedad celíaca. Los alimentos que con más frecuencia causan irritación de la lengua son los ácidos o picantes, así como ciertos componentes de la pasta de dientes o enjuagues bucales, caramelos o chicles. Para prevenir la irritación, evitar este tipo de alimentos y utilizar un dentífrico que no incluya lauril sulfato de sodio en su composición.

La aparición de placas de color blanquecino en la lengua es uno de los síntomas de la candidiasis oral, causada por un hongo (Candida albicans). Esta patología requiere tratamiento con fármacos antimicóticos.

Las aftas o llagas en la lengua provocan la aparición de unas pequeñas úlceras blanquecinas y de borde rojo intenso. Pueden causar dolor, sobre todo al hablar o comer. Entre los motivos de su aparición, el estrés y los cambios hormonales.

Es una de las enfermedades más comunes de los labios, aunque es común que pase a la lengua. Está causado por el virus del herpes simple, siendo muy contagioso (al besar, compartir vasos o cubiertos, por ejemplo).

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