Aída Nízar: Pagará una multa de 1.000 euros por faltar al respeto a la Policía. La ex Gran Hermana Aída Nízar ha sido condenada a pagar 20€ al día durante 50 días a causa de su actitud desobediente ante varios miembros de la Policía Nacional, durante la grabación de un reportaje en Elche sobre las fábricas de productos de origen chino. La polémica colaboradora se ha librado de una condena mayor, ya que en ningún momento tuvo una actitud violenta ni intentó agredirlos, pero se comportó con todo el descaro del mundo ante la autoridad, un comportamiento que ahora tendrá que pagar.
La vallisoletana Aída Nízar es conocida por todos en nuestro país gracias a su forma de ser descarada y altiva, llegando a entrar en la lista de los VIP más antipáticos de España.
El pasado verano, concretamente el 4 de julio, la ex gran hermana se encontraba en un polígono industrial de Elche grabando un reportaje para su espacio de ‘Sálvame diario’ llamado ‘Sálvese quien pueda’, relacionado con las fábricas de gente de origen chino, a causa de las quejas de los vecinos.
Según recoge el fallo del magistrado, Aída, una de las grandes hermanas mejor pagas por Interviú, entró en una de las tiendas y exclamó a los trabajadores: «¿Por qué vendéis tan barato? Sé que no tenéis seguro social», y acto seguido salió para acudir a otro establecimiento y preguntar a los clientes: «¿Por qué compráis zapatos chinos? Todo el mundo sabe que su calidad es malísima».
Al ir a entrar a un tercero, y tras haber avisado a la Policía alguno de los presentes, la vallisoletana exclamó: «Una vez más, viene la Policía a interferir en nuestra labor informativa…», mientras hacía «aspavientos con el micrófono».
Cuando los agentes se dirigieron a ella para pedirle de buenas maneras que cambiara de actitud, Aída Nízar respondió descaradamente: «si hombre, si queréis me quito también el micro de la solapa y me desnudo…», pero no fue el último, ya que al pedirle la documentación, la colaboradora aseguró que la tenía en el hotel, añadiendo: «Sabéis de sobra quien soy yo, ¿o acaso no veis la televisión?», para después preguntar: «¿Quién es el poli malo y el poli bueno?».
Tras conocer los hechos, el juez ha decretado «una falta de desobediencia leve a agentes de la autoridad y de falta de respeto y consideración debida», y ha condenado a Aída a pagar una multa de 1.000€ al Estado.
Esperamos que esto le sirva de lección para que reconozca que no es ella la que marca las leyes, y que hay que tener algo más de respeto por la autoridad.
