Alejandro Lequio: se juega el sueldo de un año con Belén Esteban [VÍDEO]

La apuesta está hecha. Alejandro Lequio es un hombre muy seguro y que cuando habla sentencia. Ahora ha querido lanzar un órdago a Belén Esteban de los fuertes. Se ha jugado el sueldo de todo un año con la princesa del pueblo. El motivo. Pues que el colaborador de Ana Rosa Quintana está convencido de que no existen unas imágenes donde Kiko Rivera insulta gravemente a Jorge Javier Vázquez tal y como había comentado la ganadora de la última edición de GH VIP.

Aunque creíamos que con la gran fiesta de clausura, el GH VIP se había acabado, estábamos confundidos. Y es que añun sigue coleando el supuesto enfrentamiento entre Kiko Rivera y Jorge Javier Vázquez. Aunque en este duelo falta un tercer púgil, Belén Esteban.

La princesa del pueblo, y ganadora de la edición 2015, aseguró que existían unas imágenes donde el hijo de la tonadillera insultaba gravemente al presentador catalán de Sálvame y Sálvame Deluxe. Metiéndose con su condición sexual.

Kiko Rivera, que va ser padre por segunda vez, ya salió en su defensa: «Nos vemos allí y ya está. Lo mejor es que yo no he dicho eso, ¿vale? Le tengo cariño y respeto y no lo diría jamás», aseguraba el hijo de Isabel Pantoja. Aunque ahora también ha sido Alejandro Lequio quien ha salido en su defensa, y lo ha hecho por todo lo alto.

¿Viaje o sueldo?El colaborador de Ana Rosa Quintana se ha jugado el sueldo de todo un año a que esas imágenes no existen. Alessandro Lecquio se juega su sueldo de un año con Belén Esteban. “Las imágenes de Kiko no existen. Belén, escúchame, mientes y que te pongas nerviosa es la mejor prueba. Me juego un año de salario a que esas imágenes no existen, si lo existen te lo daré y si existen me lo das tu a mi». Eso sí, luego tuvo que rectificar. «No me juego el salario, me juego un viaje. Te pago un viaje a ti, a Mariví, a Miguel y a la mama», ha dicho el colaborador de ‘El programa de Ana Rosa’. Aún así, ¿aceptará la apuesta la de Paracuellos?

Habrá que estar muy atentos a si Belén acepta la apuesta, o bien pasa. Y es que para jugarse todo ese dinero, hay que estar muy seguro, ¿no crees?