Dietas veterinarias para perros y gatos

Nuestras mascotas también pueden caer enfermas o padecer trastornos crónicos, siendo aconsejable adaptar su dieta para contribuir a mejorar su estado de salud.
Una adecuada alimentación forma parte de los cuidados esenciales de los perros y gatos. Una alimentación adaptada a su edad, raza, tamaño y actividad que desarrolla, entre otros factores a tener en cuenta, para favorecer su desarrollo y crecimiento en óptimas condiciones. Pero, ¿qué sucede cuando nuestras mascotas enferman? Aunque estemos acostumbrados a su vitalidad, los perros y gatos también pueden ponerse enfermos y padecer enfermedades que obligan a que revisemos su alimentación como parte del tratamiento para mejorar su estado de salud.
Las dietas veterinarias están específicamente diseñadas para dar a nuestra mascota la alimentación adecuada en momentos en los que su salud requiere redoblar sus cuidados. Así, por ejemplo, cuando nuestra mascota necesita ser hospitalizada, cuando aparece un problema de alergias, de trastornos gastrointestinales o cálculos urinarios, es fundamental que su alimentación sea revisada bajo control del veterinario, quien será el encargado de darnos las pautas necesarias sobre lo que conviene darle de comer.
Las dietas veterinarias también están aconsejadas en los casos de obesidad o sobrepeso del animal, un problema cada vez más común entre nuestras mascotas y que no debemos subestimar en ningún caso.

Es cierto que nuestras mascotas disfrutan hoy en día de mejores cuidados, y ello también incluye la alimentación, en la cual debemos establecer unas reglas para que nuestro fiel compañero de cuatro patas no termine sumando kilos de más. Y es que, al igual que en el caso de las personas, cada kilo cuenta para su salud. Un perro o un gato con sobrepeso tendrá mayores dificultades para moverse, para correr y, además, podemos estar desequilibrando su dieta, lo que no ayudará a su salud. Para que nuestra mascota recupere su peso adecuado y, sobre todo, mejoremos con la alimentación su estado físico, es aconsejable recurrir a una dieta de prescripción veterinaria para recuperar la salud con ayuda del alimento más adecuado.

Cuidado y prevenciónEl veterinario debe estar al corriente de todo lo relacionado con nuestra mascota. Así, por ejemplo, será muy útil saber si antes ha estado sometido a algún tipo de tratamiento (por ejemplo, tratamientos antihelmínticos para las lombrices, antiparasitarios para garrapatas, pulgas y ácaros, o si presenta síntomas particulares). Es fundamental recordar que nuestra mascota debe estar debidamente vacunada, la mejor prevención contra los trastornos más comunes. De lo contrario, si no está protegido protegida con vacunaciones y otras intervenciones profilácticas, es aconsejable, sobre todo cuando son cachorros (el periodo más crítico para un perro o gato es su primer año de vida), no exponerlos a lugares donde haya riesgos de contagio.
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