Cortisona y píldora anticonceptiva: interacción, precauciones y efectos secundarios

De entrada, todos los medicamentos tienen efectos secundarios. De ahí que, como normas esenciales, no debamos automedicarnos o seguir incorrectamente los tratamientos (dosis, duración…). También hay que tener cuidado cuando se toman dos fármacos al mismo tiempo ya que pueden interactuar entre sí. Interacciones que pueden atenuar o, por el contrario, exceder el efecto de uno de ellos. Es importante informar al médico si estamos tomando algún medicamento, y esto también incluye la píldora (el segundo método anticonceptivo más utilizado por las mujeres en España, por detrás del preservativo) que puede interactuar con la cortisona. Vamos a ver más detenidamente las precauciones que conviene adoptar para evitar posibles efectos secundarios. ​​
 
La píldora anticonceptiva contiene hormonas, mientras que la cortisona es un potente antiinflamatorio. Cada uno de estos medicamentos se toma para obtener un efecto terapéutico, pero tomados juntos pueden causar otros efectos secundarios indeseados. Así, la interacción de medicamentos puede aumentar o disminuir el efecto de uno de los dos e, incluso, de ambos. Puede también modificar su nivel de toxicidad y acarrear reacciones inesperadas.

Las reacciones adversas pueden aparecer a los pocos minutos, horas, días, semanas o meses de tomar los medicamentos, y en el caso específico de estos dos medicamentos el mayor período de observación debe adoptarse en el primer trimestre. Los efectos de la interacción con la píldora anticonceptiva también varían dependiendo del tipo y dosis de cortisona. En líneas generales, en el caso de la betametasona puede producirse un aumento moderado del efecto de los corticosteroides. En el caso de la interacción con prednisolona y prednisona tendrá un aumento moderado de toxicidad.

En resumen, la ingesta simultánea de cortisona y la píldora anticonceptiva provoca un aumento en los niveles de cortisona en la sangre, pero no interfiere con el efecto anticonceptivo, algo que, por el contrario, sí puede suceder cuando se toman antibióticos. Un consejo útil: antes de que el médico nos prescriba una receta debemos informarle si estamos tomando otros medicamentos.
 
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