Test de intolerancia a los alimentos: en qué consiste

Test de intolerancia a los alimentos: ¿en qué consiste? Descubre cómo se realiza la prueba y para que sirve. Dolores de estomago, malas digestiones, diarrea, alergias en la piel, dolores de cabeza… son problemas que pueden deberse a que algún alimento no es bien tolerado por nuestro cuerpo y no nos sienta bien. Pero… ¿qué productos son los que nos perjudican? Es difícil saber cuál de todos los alimentos que ingerimos nos hace daño, por eso es necesario realizarse una prueba para detectarlo.
La leche, los hidratos de carbono, los huevos o, incluso, podemos tener intolerancia la fructosa que es una sustancia natural endulzante que se encuentra en las frutas y en la miel. Cualquier alimento cotidiano puede estarnos provocando un trastorno y no saberlo. Si notas que después de comer, padeces una mala digestión o tienes otras reacciones negativas como eccemas, urticaria, migrañas, dolor de estómago, psoriasis… puede ser que la ingestión de un determinado alimento no es tolerado por tu cuerpo.
 
Para detectar cuáles son los alimentos que consumimos y son perjudiciales para nuestra salud es necesario realizarse un test de intolerancia alimentaria. Una prueba muy sencilla mediante la cual se extrae un poco de sangre del paciente para analizarla y probar cómo reacciona al contacto con las sustancias alimentarias.
 

Una vez que se realice el examen de la sangre, el nutricionista o el endocrino explicará los resultados al paciente para exponerle cuáles son los alimentos dañinos y que, por tanto, debe eliminar de su dieta para evitar los daños que estos causan en su salud. Por ejemplo, las personas que sufren intolerancia a la leche deberán llevar a cabo una dieta sin lactosa en la que eviten consumir alimentos como la leche, el queso, la nata, los helados de leche, el pan de molde, los batidos, la bechamel, la bollería industrial elaborada con leche, los postres hechos con leche…
 
No obstante, hay que sustituir los alimentos que no se toleren bien (y sean importantes en nuestra alimentación) por otros que aporten esas propiedades necesarias para que nuestro organismo funcione correctamente y así llevar una dieta sana y equilibrada que sea beneficiosa para nuestra salud.