Cómo detectar maltrato psicológico en la relación de pareja de tus hijos

El maltrato psicológico no solo se produce en las relaciones de pareja de adultos, sino que también puede empañar las relaciones afectivas de los más jóvenes. Adolescentes y jóvenes que, en algunas ocasiones casi de manera inconsciente, se exponen y reproducen roles sexistas. ¿Cómo saber si tu hijo o hija está siendo maltratada por su pareja?

Los jóvenes y adolescentes son los principales usuarios de las nuevas tecnologías, y tanto internet como las redes sociales se han convertido en una nueva forma de ejercer control. Los expertos ya le han puesto nombre, es la ciberdelincuencia de género. Las cifras sobre el maltrato no engañan y son realmente preocupantes. Según el Barómetro 2017 del ProyectoScopio, del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, más del 27,4 % de los jóvenes de entre 15 y 29 años considera que la violencia machista es una conducta normal en el seno de una pareja.

Maltrato psicológico en parejas jóvenes

El maltrato psicológico o emocional es un tipo de violencia que puede pasar más desapercibido, y que aunque no deja huellas físicas sí puede dejar unas profundas heridas emocionales, como la pérdida de autoestima y de confianza, sentimiento de inferioridad, dependencia emocional, depresión, desánimo o tristeza.

Las faltas de respeto, los comentarios ofensivos, controlar la manera de vestir o de comportarse son formas de maltrato psicológico, pero no las únicas. Pedir las contraseñas a tu pareja para entrar en sus perfiles, vigilar las llamadas y con quién mantiene conversaciones por el Whatsapp son otra manera de ejercer control sobre la pareja. Nada de esto, ni mucho menos los celos o el intento de dominio sobre la otra persona, son pruebas de amor, como erróneamente puede hacer el primer amor, sin duda el más fuerte por los sentimientos desconocidos que despierta.

Señales de maltrato psicológico en una relación

Hay algunas señales que, como padres, nos pueden alertar del maltrato psicológico en la relación de pareja de los hijos, una situación de vulnerabilidad que requerirá toda la confianza y apoyo familiar para salir de una relación muy tóxica:

• Evita salir con los amigos/as.
• Deja de realizar actividades que antes le gustan.
• Cambios de humor, nerviosismo o irritabilidad.
• Cambios notables en su forma de vestir.
• Manifiesta inseguridad e incluso se avergüenza en público de su pareja.
• Su pareja la llama constantemente o envía mensajes para saber dónde está o reclama su atención continua.
• Tendencia a sentirse culpable y a justificar los comentarios o comportamientos posesivos de su pareja.