[multipage]
 
 Saltarse las comidas es uno de los errores en los que se cae con mayor frecuencia, pensando que de esa manera recortaremos calorías y perderemos más peso. Falsa creencia, ya que el resultado será justo el contrario al deseado, haciendo incontrolable el apetito y con seguridad comiendo más de la cuenta en la siguiente comida. Si quieres que la dieta funcione, toma nota de los motivos por los que no conviene saltarse ninguna comida. [/multipage]
[multipage]
 1. Evitar una hipoglucemia
 
 Debemos hacer 5 comidas al día, 3 principales (desayuno, comida y cena) y 2 tentempiés (a media mañana y merienda). No dejar pasar más de 2-3 horas entre cada comida, para mantener estables los niveles de glucosa y evitar bajones (hipoglucemia), cuando al organismo le falta energía. [/multipage]
[multipage]
 2. Efectos de saltarse el desayuno
 
 El desayuno es una de las comidas más importantes para activar el organismo. Si te saltas el desayuno comerás más en la siguiente comida y tu organismo, al darle menos alimento, se volverá más ahorrador y quemará menos. El desayuno ideal debe incluir un lácteo desnatado, una pieza de fruta fresca y cereales integrales. [/multipage]
[multipage]
 3. Tentempié entre horas
 
 Hacer un pequeño tentempié a media mañana y a media tarde ayuda a perder peso, porque acelera el metabolismo y reduce la ansiedad por la comida. Algunos de los tentempiés más adecuados en una dieta adelgazante son un yogur desnatado y una nuez, un vaso de leche desnatada y 1-2 galletas o una pieza de fruta y una loncha de queso fresco con 0% materia grasa. [/multipage]
[multipage]
 4. Efectos de saltarse la cena
 
 Lo más recomendable es ingerir las 2/3 partes de las calorías diarias antes de las 6 de la tarde, ya que en la segunda mitad del día el metabolismo se ralentiza y quema peor los excesos. La cena debe ser ligera, pero eso no significa que haya reducirla al máximo, porque el organismo notará la falta de nutrientes y te despertarás por la noche con un hambre incontrolable. [/multipage]
[multipage]
 5. Comer por la noche
 
 Si nos despierta el hambre por la noche, no solo tendemos a tomar alimentos más calóricos, sino que al estar en reposo no quemas las calorías que ingieres y las acumulas en forma de grasa en el abdomen y las caderas. [/multipage]
 
 




