¿Cómo hacer una dieta depurativa después de las vacaciones? Te mostramos la mejor forma de volver a acostumbrar a tu cuerpo a la comida sana y a eliminar los excesos del verano en una semana.
Durante los últimos meses nuestros hábitos han cambiado radicalmente; hemos pasado del pantalón largo al bikini, de la oficina a la playa o la piscina, y por supuesto hemos cambiado las ensaladas por otras comidas más calóricas, a las que llamamos comúnmente “caprichos”, sin embargo ha llegado la hora de decir adiós al adorado verano para volver de nuevo a la rutina.
Seguramente tras tu vuelta de vacaciones habrás notado que tus prendas te quedan algo más justas de lo normal, o que tu intestino no funciona como habitualmente, por lo que ha llegado el momento de cuidarse y depurarse.
Con esta dieta depurativa conseguirás decir adiós a la grasa de tu organismo y los kilos de más en una semana, anímate y lo conseguirás sin darte cuenta.
Dieta depurativa post-vacaciones
- Desayunos: Café o té con leche semidesnatada o zumo de naranja con 2 cucharadas soperas de cereales integrales, uno de los alimentos que más ayudan a quemar calorías, 2 tostadas de pan integral con pavo, jamón York, mermelada light o queso de Burgos, o yogurt desnatado con 4 galletas integrales o 2 kiwis.
- Almuerzos: Una pieza de cualquier fruta a excepción del plátano o las uvas.
- Comidas: Comenzamos con un plato de acelgas hervidas, judías verdes o col con patatas, champiñones a la plancha, puré de verduras o espinacas hervidas; de principal podemos optar por un bistec de ternera, un cuarto de pollo o una rodaja de salmón a la plancha, pasta con aceite de oliva, arroz blanco con tomate o lentejas hervidas y terminamos con un café o infusión.
- Meriendas: Una pieza de fruta excepto plátano o uvas o un yogurt desnatado.
- Cenas: Puedes elegir entre una ensalada verde de lechuga, endibias, pepino, etc., una ensalada completa de lechuga, tomate y pepino, verduras a la plancha, judías verdes al vapor, espinacas hervidas o puré de verduras, acompañado por palitos de cangrejo, un huevo duro, lenguado a la plancha con limón, rape a la plancha, 2 kiwis o 60g de queso de Burgos, y para terminas una infusión.
Recuerda que debes tomar alimentos poco calóricos y procurar que el estómago no deje de hacer la digestión en todo el día, así quemará calorías sin que lo notes.
Acompaña esta alimentación con una sesión diaria de ejercicio moderado como puede ser caminar durante una hora, y verás cómo tu energía va en aumento y tu cuerpo notará un cambio de lo más beneficioso.
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