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Lamar Odom está en boca de todos. El jugador de la NBA, que llegó a jugar junto a Pau Gasol, se encuentra entre la vida y la muerte. Una vida llena de vicios que ha llevado hasta el último extremo. Hace dos días fue encontrado inconsciente en un burdel y con síntomas de haber tomado drogas y alcohol. Odom también es conocido en el mundo del corazón ya que es el actual marido de Khloé Kardashian, una de las hermanas de la famosa saga.
Otro juguete roto. Otro deportista de éxito que no ha sabido asimilar su fama y riqueza. Lamar Odom, jugador de baloncesto de la NBA, se debate entre la vida y la muerte después de ser encontrado inconsciente en un burdel de Love Ranch, en Crystal (Nevada), a unos 112 kilómetros de Las Vegas. En su cuerpo había restos de viagra, cocaína y alcohol. Una mezcla explosiva que una persona de su corpulencia puede aguantar.
Pero además de su lado deportivo, Odom también tiene su lado del famoseo, ya que es el marido de una de las hermanas Kardashian, en este caso de Khloe. En 2009 contrajo matrimonio con ella con quién se separan en el año 2014, debido a rumores de infidelidad por parte del basketbolista. Mientras la pareja transitaba por el divorcio se filtró un video de Odom y uno de sus amigos luego de haber fumado crack hablando sobre su infidelidad durante el matrimonio, las maneras en las que hacía dinero sin la NBA, entre otras cosas. Khloé y Lamar firman los papeles de divorcio en 2015. Y durante estos días se tenía que hacer efectivo.
Los médicos que le atienden, que hablan de un 50% de posibilidades de salir con vida, hablan de fallos de órganos incluyendo el corazón, los riñones y los pulmones. No descartan que pudieran quedarle secuelas irreversibles en el cerebro.
Una vida marcada por el drama Y es que la vida de Odom está marcada por la tragedia. Fue el niño de Queens que enterró a los 12 años a su madre, víctima de un cáncer de colon; fue el nieto que despidió a su abuela-tutora cuando aún no era un hombre; fue el padre de Destiny, Lamar Jr. y Jayden que en 2006 lloró la muerte súbita de la pequeña, de sólo seis meses; y fue el amigo que este junio guardó luto por el disc-jockey Jamie Sangouthai, infectado por una aguja. Todo esto sumado a consumos de marihuanas y a faltas de disciplina cuando ha jugado en la NBA. Solo su época junto a Pau Gasol, en los Lakers, donde sumó dos anillos de campeón puede considerarse de tranquila.
Así es Lamar Odom, un genio sobra la cancha, pero que no ha sabido asimiliar el éxito. Aún así, esperemos que se recupere y no le deje secuelas.
