Mariló Montero: se queda sin su espacio de opinión tras su error. La presentadora Mariló Montero ha protagonizado este último mes varias polémicas en torno a una serie de comentarios desafortunados. El primero fue con su compañera de cadena Anne Igartiburu, y el último y más criticado ha sido en referencia a los trasplantes de órganos y su duda sobre si el alma se trasplantaba junto a ellos. Esto ocurrió durante el espacio editorial con el que finalizaba el programa, que recientemente ha sido cancelado junto a otras modificaciones de ‘Las mañanas de la 1’, suponemos por su error, a pesar de que la cadena no ha dado explicaciones.
El programa ‘Las mañanas de la 1’ ha decidido hacer algunos cambios en su formato, suprimiendo el espacio editorial de Mariló Montero que lo cerraba cada día, a raíz de la polémica que suscitaron sus comentarios acerca de los trasplantes de órganos el martes de la pasada semana.
Un día después, el pasado miércoles, la periodista tuvo que pedir disculpas en público por su error, con la frase: «Pido disculpas a quien se haya sentido ofendido. No quise juzgar a nadie. Solo hice una pregunta, porque tengo mis dudas, de si los órganos tienen alma. Quiero dejar claro que yo soy donante de órganos. Siento que TVE se tenga que sentir comprometida otra vez por una opinión mía que es totalmente personal», tal y como hizo con su compañera Anne Igartiburu el pasado mes. El jueves decidieron ocupar este espacio para felicitar al programa de La 2 ‘Pueblo de Dios’ por su 30 aniversario, y el viernes regresó para hablar de los deshaucios.
Pero el pasado lunes toda la audiencia pudo ser testigo de que Mariló Montero se despidió con un escueto ‘Salud y suerte’, pero sin añadir nada más.
Además el programa ha decidido cambiar el horario del debate político, que antes tenía lugar entre las 13.30 y las 14.00, para anticiparlo de 11.30 a 12.00.
Las fuentes responsables de hacer públicos estos cambios no han dado ningún tipo de explicación al respecto, pero es bastante obvio pensar que ha sido por la metedura de pata de su presentadora, con quien contarán a pesar de que su contrato finaliza en diciembre.
Las malas lenguas han llegado a afirmar que si Mariló no mantuviera una relación con su jefe Santiago González, con quien comenzó un romance tras su separación de Carlos Herrera, seguramente ya habría sido sustituida, pero esperamos que la presentadora se limite a partir de ahora a transmitir su opinión profesional, y no tenga que volver a disculparse de nuevo.
