Un hecho real: los primeros encuentros en la adolescencia son inevitables. Pero es cierto que en este período de nuestra vida tenemos las hormonas más revolucionadas, por lo que toda la información que recibamos es poca. Y como adultos, ¿qué debemos aconsejar a nuestros hijos sobre este tema?
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que se trata de una época rebelde e impulsiva. Los adolescentes se mueven más por sus instintos que por la lógica, pero deben saber que la cabeza no está enfrentada a los sentimientos.
Hay épocas donde prefieren estar más aislados y solitarios. Y es que los cambios físicos en su cuerpo, son motivos suficientes para ir aceptándose poco a poco. Es en estos momentos cuando la autoestimulación toma más importancia. No es que estén pensando todo el día en lo mismo, es que necesitan momentos de intimidad para ir conociendo su cuerpo, sus genitales, cómo funcionan las relaciones por medio de caricias…
De todas formas es bueno diferenciar las distintas etapas de la adolescencia para entenderlos mejor:
- Primera adolescencia: Va de los 10 a los 13 años. Aquí todavía nos encontramos a unos niños muy ligados a sus padres, aunque ya empiezan a explorar por su cuenta el mundo. Lo normal es que físicamente no se hayan desarrollado todavía.
- Adolescencia Mediana: La podemos situar de los 14 a los 17 años. Ahora los amigos toman más importancia que los padres. Se experimentan nuevas sensaciones de amor platónico, miedos y vergüenzas en relación a las personas que les gustan. Comienza a darse los noviazgos, la autoestimulación, las “fantasías”, las primeras relaciones íntimas… por lo que los padres deben estar atentos y proporcionar la mejor información a sus hijos en cuanto a relaciones amorosas, métodos anticonceptivos…
- Adolescencia tardía: Jóvenes de los 17 a los 19 años. En esta etapa están más centrados y su responsabilidad es mayor. Escuchan más y se retoma el contacto normal con la familia. Son muy comunes las primeras relaciones estables y también los primeros desengaños serios. Sus encuentros en este momento de la vida son algo fundamental y significativo para ellos, y sus relaciones normalmente serán con esa persona tan especial de la que están enamorados.
Es primordial que los adolescentes no vean a sus padres como enemigos, sino como personas que están interesadas en sus cambios y les quieren ayudar. ¡Requiere paciencia, pero comprobarás que tenerlos a tu lado es una gran recompensa!
