Inyecta bótox a su hija de ocho años y pierde su custodia. Kerry Campbell explicó hace unos días en un programa de televisión norteamericano como sometía a su hija a duras sesiones de estética en las que se incluía sesiones de inyecciones de bótox y depilación por cera para que la pequeña ganara los concursos y certámenes de belleza a los que la presentaba. Tras la publicación de la controvertida entrevista, las denuncias no se hicieron esperar y finalmente las autoridades de San Francisco han decidido retirarle su custodia.
En una edad en la que los niños tienen que disfrutar y jugar, la obsesión por la belleza ha llevado a una madre de Estados Unidos, Kerry Campbell a someter a su hija Britney de tan sólo ocho años a sesiones de estética indicadas para mujeres mayores y no para niñas. Inyecciones de bótox (sustancia conocida en términos médicos como toxina botulínica) en la frente, en los ojos y en los labios, depilación de las cejas y las piernas con cera… todo con el fin de que su hija sea la más guapa en los concursos de belleza y tenga confianza en sí misma.
Tratamientos de estética que la propia madre realizaba a su hija en casa para eliminar sus arrugas y conseguir un rostro de muñeca mas que sin arrugas, sin signos de expresión porque ¿qué arrugas puede tener en la cara una niña de ocho años?
Una obsesión por la perfección que puede tener consecuencias dañinas no sólo en la salud física de la pequeña sino también en el desarrollo psicológico de la niña a la que su madre le está enseñando que lo más importante para tener éxito en la vida es la imagen. Motivos por los que finalmente, y tras estudiar con detenimiento el caso, los servicios de protección de menores han decidido retirar la custodia de Britney a su madre, quien ha declarado que se siente arrepentida y que luchará por volver a estar con su hija.
