Uñas amarillas por el tabaco: Remedios eficaces. Si una cosa tenemos clara es que el tabaco no es nada recomendable por muchas razones. La principal, por los efectos nocivos que tiene en nuestra salud, seguida por el gasto que supone, la adicción que implica, la sensación de malestar y de nerviosismo que se produce cuando no se puede fumar y también las consecuencias físicas y estéticas que provoca. ¿Qué cuáles son esas consecuencias? Por ejemplo, pone amarillos los dientes y las uñas. Si eres de esas personas fumadoras en que las uñas han sufrido las consecuencias, te enseñamos algunos truquitos para que las uñas mantengan su color natural.
El tabaco es una de las adicciones más grandes de todo el mundo. De hecho nos hemos hecho una pregunta ¿te vacunarías contra la nicotina?, que como sabéis es el primer componente, entre otros, de los cigarrillos que consumimos diariamente.
Esta adicción, nada beneficiosa ni para nuestra salud ni para nuestra estética, y tampoco para nuestro bolsillo.
De entre todas las cosas malas que nos produce el consumo habitual de este producto se encuentran los problemas que sufren, algunas parejas, debido principalmente a la adición que provoca.
El tabaco, a parte del mal que hace a nuestra salud, como enfermedades pulmonares crónicas, cáncer de garganta y de pulmón, etc. también supone un quebradero de cabeza para otras zonas de nuestro cuerpo que ven como se afean, se ensucian y se desgastan como consecuencia del humo.
¿Cómo eliminar las manchas amarillas de las uñas provocadas por el tabaco?
Si lo que queremos es lucir unas manos perfectas y unas uñas cuidadas, debemos tener mucho cuidado y seguir unos pequeños consejos para eliminar las manchas amarillas provocadas por el tabaco.
Para ello, os recomendamos que hagáis estos tratamientos caseros:
- Remoja las uñas aproximadamente 5 minutos en zumo de limón. Posteriormente remójalas la misma cantidad de tiempo en leche.
- Utiliza agua oxigenada en vez de limón y realiza el mismo procedimiento. Introduce las uñas en un tarrito con agua oxigenada y agua caliente durante aproximadamente 10 minutos.
- Sumerge las uñas en vinagre blanco, al menos 5 minutos.
- Frota tus uñas diariamente, al menos dos veces al día, con aloe vera y dales un pequeño masaje.
Tanto el limón, como la vinagre o el agua oxigenada son muy fuertes, por lo que no deberéis haceros este tratamiento diariamente (salvo el de aloe vera) ya que de otra forma podréis estropearos las uñas.
