Hábitos alimentarios niños: Cómo dar ejemplo

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Hábitos alimentarios niños: Cómo dar ejemplo. La familia, el hogar, es donde adquirimos desde las primeras etapas las pautas sobre alimentación. Hábitos alimentarios que los más pequeños de la casa van adquiriendo y adoptando tras observar la forma de comer, los alimentos que se ingieren, compran y cocinan en casa. En otras palabras, los más pequeños de la casa se van acostumbrando a los hábitos alimentarios de los padres. En otras palabras, los mayores dan ejemplo a los más pequeños, por eso es importante seguir una alimentación sana, variada y equilibrada.
 
Enseñar y aprender. Los más pequeños de la casa observan y adoptan nuestros hábitos alimentarios, por eso es importante dar un buen ejemplo. Hay una serie de consejos y premisas que no nos debemos saltar, tanto para que nuestra dieta sea sana y equilibrada como para que los más pequeños adopten hábitos saludables desde la infancia. Los niños observan nuestra forma de comer, los alimentos que compramos, cocinamos e ingerimos, y terminan acostumbrándose, y también adoptando, nuestros hábitos.
 
El primero de los consejos a seguir, y que debemos enseñar a los más pequeños, es la importancia de no saltarse ninguna comida. Se deben hacer cinco comidas, repartiendo las calorías a lo largo del día: 20% en el desayuno, 10% en el almuerzo o tentempié a media mañana, 35% en la comida, 10% en la merienda y 25% restante en la cena.
 
Entre todas las comidas, el desayuno es la que nos reporta la energía necesaria para iniciar el día con buen pie y que nuestro organismo funcione de manera correcta sin pérdida de rendimiento. Un desayuno en el que no deben faltar los cereales (pan, galletas), la fruta (o zumo) y los lácteos. Es aconsejable que los más pequeños no abusen de la bollería.
 
En cuanto a los zumos, mejor siempre de fruta fresca, ya que los zumos envasados tienen poca cantidad de fruta y más azúcares simples. El agua también es mejor que los refrescos.
 
Otros consejos a seguir para que los más pequeños adquieran hábitos saludables son:

  • Comer en familia, y hacerlo de manera relajada. Es importante comer despacio y sin distracción (televisión, vídeojuegos).
  • Tanto el almuerzo como la merienda son importantes, pero las raciones deben ser moderadas para evitar que a la hora de la comida o de la cena no tengan hambre.
  • Al igual que en la dieta de los adultos, la alimentación de los niños debe cuidar el consumo de sal. Los alimentos enlatados, los snacks o los precocinados tienen elevadas cantidades de sal, por lo que es aconsejable que su consumo sea lo más moderado posible.
  • Moderar el consumo de carne, sobre todo la procesada (hamburguesas, salchichas…), así como los embutidos, ya que contienen más grasas y sal.

Comer de todo

Comer de todo es una de las premisas de una dieta sana y equilibrada. Es importante que nuestra dieta sea variada, es decir, contenga alimentos de todos los grupos para obtener todos los nutrientes necesarios. Es importante que los niños se acostumbren a comer de todo, especialmente alimentos como las frutas, pescados o las verduras, alimentos muy aconsejables para los niños, pero que no siempre son sus preferidos. No obstante, tal y como aconsejan los especialistas en nutrición, antes de eliminar un alimento de la dieta del niño por considerar que no les gusta, es importante prepararlo de diferentes maneras. Por ejemplo, en el caso de las verduras, si rechazan los purés, se pueden combinar con jamón cocido, queso o eligiendo las verduras que más les gusten.

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