Perder peso: Quema calorías sin esfuerzo. No se trata de comer menos, sino de organizar y controlar qué comemos. Una regla tan sencilla como el hacer cinco comidas al día nos ayudará a evitar las tentaciones entre horas y la sensación de hambre. Una dieta equilibrada y sana, ajustada a nuestras necesidades, es la mejor manera de quemar calorías y evitar, sobre todo a partir de una determinada edad, la acumulación de grasa en determinadas zonas del cuerpo, con especial predilección en el caso de las mujeres por la zona de la barriga.
Medirse la cintura, a la altura del ombligo, permite determinar, junto con la báscula y el índice de masa corporal, si los kilos de más o acumulación de la grasa abdominal o visceral pueden resultar perjudiciales para el organismo. Más de 82 centímetros en la mujer es indicativo que hay que revisar la dieta y los hábitos. Un exceso de grasa aumenta los riesgos de sufrir trastornos cardiovasculares (hipertensión arterial, arteriosclerosis), disminución de las defensas y de alteraciones metabólicas (colesterol, niveles altos de triglicéridos, diabetes).
Además de controlar cómo comemos también hay que revisar qué comemos, porque algunos alimentos serán un capricho prohibido para nuestro organismo mientras no resolvemos el problema de acumulación de grasa abdominal o visceral. Se trata, entre otros, de la carne roja, embutidos, precocinados y bollería, alimentos y productos con un alto nivel de grasas saturadas y que, consumidas en exceso, pueden desequilibrar nuestra dieta. En este caso, es aconsejable optar por una dieta rica en fibra. Mientras que el azúcar de los dulces, bollería y harinas, favorecen la acumulación de grasa en la zona abdominal, la fibra de alimentos como las frutas y verduras y los alimentos integrales (arroz, pasta, pan) tienen justo el efecto contrario.
Aliados naturales para perder peso
Uno de los motivos por los que, a partir de una determinada edad (en torno a los 40) aumenta la tendencia a acumular grasa en la zona abdominal es que, a medida que nos hacemos mayores, nuestro metabolismo se va ralentizando. Para activarlo, además de una dieta sana y equilibrada, es aconsejable realizar ejercicio físico. Para estimular el metabolismo también pueden ayudarte algunos otros remedios naturales que tenemos a nuestro alcance en la despensa:
- Té verde: No solo ayuda a perder kilos, sino que también favorece la combustión de la grasa acumulada. Incluir el té, del que podemos encontrar diferentes variedades en forma de infusión, en nuestra dieta puede reportar interesantes beneficios para nuestro organismo.
- Los alimentos integrales, entre sus múltiples funciones, favorecen el metabolismo. Además de la pasta, pan y arroz, también es interesante combinar una cucharada de salvado de avena con el yogur.
- Las frutas y las verduras son esenciales en cualquier dieta. Además, en este caso, son un alimento idóneo para activar el metabolismo. En los meses de calor y de altas temperaturas, nuestro metabolismo tiende a volverse más perezoso. Para animarlo, nada como un gazpacho, crema fría o zumo a base de frutas de temporada.
- La hidratación es fundamental, en concreto, el ingerir al menos dos litros de líquidos al día (agua, infusiones, zumos, caldos). Precisamente en infusión se puede tomar el alga fucus, un estimulante natural que, además de una importante fuente de yodo (un mineral esencial para el correcto funcionamiento de la glándula tiroides y cuya carencia puede provocar un aumento de peso injustificado), también activa el tránsito intestinal y ayuda a prevenir la retención de líquidos. También se puede tomar en cápsulas.
Tal y como hemos señalado anteriormente, no solo es importante qué alimentos incluimos en nuestra dieta, sino cómo distribuimos las comidas. Debemos realizar cinco comidas al día, evitando que la última, la cena, sea copiosa y justo antes de ir a descansar.
