¿Cómo combatir las alergias? Con los probióticos y, por supuesto, con una sana y correcta alimentación. Una combinación perfecta para ayudar a fortalecer nuestro sistema inmunológico y mantenerlo protegido ante diferentes trastornos, y que viene además avalada por los resultados de un estudio realizado por investigadores del Instituto de Investigación de Alimentos en Norwich (Reino Unido). Dicho estudio sostiene que los cambios en la composición de la flora intestinal podrían estar implicados en la aparición de trastornos alérgicos de temporada, por lo que resultaría muy útil agregar algunos probióticos a la dieta.
Los probióticos no sólo se utilizan para mantener alejadas las alergias, sino también para regular el tránsito intestinal (tanto en el caso de disentería como de estreñimiento) y para reducir los niveles de colesterol. Además, ayudan a combatir los efectos negativos de una vida sedentaria, así como los debitos a hábitos alimenticios poco equilibrados.
Los probióticos tratan las alergias El estudio se realizó con la participación de dos grupos de pacientes diagnosticados con rinitis alérgica. Un grupo tomó durante dos semanas una leche fermentada que contiene bacterias lácticas probióticas, mientras que al segundo grupo se le administró durante el mismo período un placebo. A través de los análisis de sangre realizados a los participantes de ambos grupos, los investigadores analizaron las respuestas del sistema inmune antes del inicio de la temporada de alergias primaverales (abril), durante el verano y al final de la temporada (agosto). ¿Cuál fue el resultado? El grupo que tomó probióticos tenía alergias menos severas que los que tomaron placebo.
¿Cuáles son los alimentos ricos en probióticos? Decenas de alimentos de nuestra despensa, aunque no lo sepamos, son ricos en bacterias de ácido láctico. Entre ellos, destaca el yogur, siendo aconsejable tomarlo en el desayuno con avena o, de manera alternativa, con piezas de fruta fresca. También son ricos en probióticos los productos lácteos, con el famoso L actobacillus casei, Lactobacillus acidophilus 1 y bifidobacterias.
Incluso las frutas tropicales, como la piña y papaya, contienen enzimas que facilitan el buen funcionamiento del proceso digestivo. La primera es rica en bromelina, muy importante para digerir el almidón, mientras que la papaya contiene papaína, que ayuda a eliminar la hinchazón y ardor de estómago después de las comidas. En una dieta saludable tampoco puede faltar el salmón, rico en ácidos grasos omega 3 que ayudan a reducir la cantidad de triglicéridos en la sangre, así como fitoesteroles.
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