[galleria id=»2541″]Blanca Suárez y Miguel Ángel Silvestre pasan Fin de Año en Cádiz. La revista ¡Hola! ha sido la encargada de mostrar las imágenes de la feliz pareja de actores que ha pasado unos días durante estas vacaciones de navidades en Cádiz, destino que eligen en muchas ocasiones para desconectar y poder pasar tiempo juntos. A pesar de que no es época de playa, en el sur de España el invierno siempre es más suave, con lo que muchos famosos huyen del frío de la capital para disfrutar de las agradables temperaturas y de paseos a la orilla del mar durante todo el año, como han hecho Blanca Suarez y Miguel Ángel Silvestre en compañía de su perro.
A pesar de haber tenido crisis al principio de su relación que hicieron que se separaran, para luego volver a retomarla, Miguel Ángel Silvestre y Blanca Suárez viven ahora uno de sus mejores momentos, y a pesar de que intentan ser discretos con su relación, no consiguen evitar los objetivos de las cámaras que siempre tratan de pillarles en sus momentos más románticos y de mayor complicidad.
Las últimas imágenes de estos dos enamorados han sido de estas vacaciones, ofrecidas por la revista ¡Hola!, en las que han aprovechado para pasar unos días en Cádiz, donde han dado largos paseos por las playas y han disfrutado del sol y las suaves temperaturas del sur en esta época del año entre cariños y arrumacos. Además, el actor de “Sin tetas no hay paraíso” ha aprovechado para practicar uno de sus deportes favoritos, el surf. Ésta no es la primera vez que le vemos practicándolo por lo que su pasión por él es evidente, aunque esta vez no contó con la compañía de su novia entre las olas, algo que sí que ha hecho en otras ocasiones, como cuando celebraron su primer aniversario como pareja.
En este romántico viaje la pareja no estuvo sola, sino que contó con la compañía del nuevo miembro de la familia desde el mes de diciembre, un perro de raza Teckel que Miguel Ángel regaló a Blanca y con el que está encantada. Los tres dieron largos paseos por la playa donde la mascota disfrutó como el que más enredándose entre los pies de su dueña.
Muestras de cariño y gran complicidad es lo que ha reinado en este viaje en el que la pareja ha aprovechado para pasar tiempo juntos los dos solos, ya que por sus respectivos trabajos, seguro que no tienen el suficiente que les gustaría tener para dedicar al otro. Da gusto comprobar que cada vez que están juntos lo único que se ve entre ellos son besos, abrazos y todo tipo de cariños propios de dos verdaderos enamorados.
