Cuánto ejercicio deben practicar los niños según su edad

Fomentar la práctica de actividad física es uno de los hábitos saludables que, como padres, debemos enseñar a nuestros hijos. Hacer ejercicio a diario, adaptado a su edad y condición física, es fundamental para reforzar su salud y bienestar. Entre los múltiples beneficios que reporta el ejercicio físico hay que destacar que es un aliado excepcional contra el sobrepeso u obesidad infantil, un trastorno cada vez más frecuente entre los niños y adolescentes, y entre cuyos factores de riesgo se incluye el llevar una vida sedentaria. No podemos olvidar tampoco que adoptar unos hábitos saludables en la infancia hace adultos más sanos. Pero, ¿cuánto ejercicio deben practicar los niños?

Cuánto tiempo

Siguiendo las recomendaciones de los expertos y de la OMS (Organización Mundial de la Salud), los niños y jóvenes de entre 5 y 17 años conviene que practiquen actividad física durante al menos una hora al día. Entre otros beneficios, ayuda a un desarrollo cardiorrespiratorio y metabólico saludable. Lo más aconsejable es dividir la práctica en dos tandas de media hora a lo largo del día.

Antes de los 5 años la actividad física también se puede favorecer. Así, durante los dos primeros años, lo importante es el juego y el movimiento libre. Entre los 2 y los 4 años se aconsejan los juegos con pelota, saltar, ir en triciclo. A partir de los 4 años se pueden potenciar las actividades para mejorar la habilidad, coordinación y equilibrio, por ejemplo, aprendiendo a montar en bicicleta.

Tipo de ejercicio

Los niños deben practicar tres tipos de ejercicios:

  • Ejercicios de resistencia: Mejora la fuerza muscular.
  • Ejercicios aeróbicos: Mejoran el sistema cardiovascular y cardiorrespiratorio.
  • Ejercicios de esfuerzo óseo: Para fortalecer los huesos.

Estos ejercicios deben formar parte de su actividad física a través de juegos, actividades recreativas, ejercicios programados en la escuela o en familia, desplazamientos (por ejemplo, ir al colegio andando) o actividades de educación física.

Empezar poco a poco

Si el niño no está habituado a practicar ejercicio físico es importante comenzar de manera gradual. Es importante despertar su interés, con la práctica de aquellas actividades o deportes de su gusto y preferencia, ya que de lo contrario se aburrirá rápido. Es aconsejable empezar con pequeñas dosis de actividad e ir aumentando de manera gradual en duración, intensidad y frecuencia.

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