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‘No lo sé’, ‘No puedo’ o ‘No es mi responsabilidad’. Son algunas de las frases, argumentos o excusas -todo depende del contexto- que conviene guardarse y no mencionar delante del jefe, sobre todo si no queremos delatar alguno de nuestros puntos flacos. Es cierto que en ocasiones uno no puede contenerse y termina diciendo algo que quizá en otro momento no hubiera planteado así, pero en otros nos dejamos llevar por otros motivos y emociones (desde el estrés al cansancio o la monotonía del trabajo) que no hacen sino mostrarnos como realmente no queremos. He aquí una lista de las 15 cosas que no deberías decir a tu jefe. [/multipage]
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1. No puedo
Dos palabras, no puedo, que dichas al jefe pueden hacer que, en un determinado momento, pierda la confianza en nosotros. Dos palabras que pueden hacer que, en un futuro, no seamos tenidos en cuenta como candidatos para asumir ciertos retos laborales, así que antes de decir no piensa bien las razones. [/multipage]
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2. No es mi responsabilidad
La línea que separa hasta donde llega la responsabilidad de uno en el trabajo es demasiado delgada, y mucho más a ojos de los jefes. Puede denotar justo lo que no queremos, falta de responsabilidad o de implicación, máxima cuando el mercado actual busca un perfil multidisciplinar y flexible. [/multipage]
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3. No lo sé
Hay respuestas que, directamente, al jefe no le valen, y decir ‘No lo sé’ es justo lo que no quieren oír, sobre todo en momentos en los que hay que tomar decisiones importantes o corregir errores cometidos. Si no se sabe la respuesta, al menos hay que tratar de formular una posible teoría. [/multipage]
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4. No sin explicaciones
Decir no simplemente resulta tajante, y además puede ser percibido por el jefe como un desafío. Tanto si la respuesta es afirmativa como negativa, conviene dar algún tipo de explicación que la apoye, porque de lo contrario podemos dar sensación de no estar interesados. [/multipage]
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5. No es lo que he oído
Si no estás seguro de algo, y tu conocimiento a la pregunta que te hace el jefe se basa solo en rumores, es mejor no dar una respuesta ya que podríamos dar una mala impresión, con frases como No es lo que he oído. Lo mejor es responder que no tenemos conocimiento. [/multipage]
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6. Lo siento, pero…
Si nos hemos equivocado, lo más sensato y responsable es reconocerlo. Buscar excusas o medias verdades no es el mejor camino para abordar la conversación con el jefe. Además, no pasa nada por reconocerlo, ya que denota que somos sinceros. Lo siento, no volverá a pasar, sin peros. [/multipage]
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7. Dejo la empresa
Amenazar con querer dejar el trabajo puede interpretarse como un comportamiento poco profesional. De hecho, el jefe puede pensar que en realidad no tenemos el perfil adecuado para la empresa si ante los primeros obstáculos o inconvenientes queremos marcharnos. [/multipage]
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8. En realidad no es mi culpa, es culpa de…
En el colegio nos hubieran tildado de chivatos, posiblemente, pero en la edad adulta simplemente es una falta de madurez. Es mejor asumir la responsabilidad, tanto si lo hacemos bien como si lo hacemos mal, evitando señalar o echar culpas a los demás. [/multipage]
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9. Me aburro
Una frase que no debes decir nunca delante de tu jefe es ‘Me aburro’, porque lógicamente va a pensar que resultamos improductivos o que realmente no soportamos nuestro trabajo También puede hacer pensar al jefe que no tenemos interés o que hemos perdido la motivación por el trabajo. [/multipage]
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10. No me llevo bien con esta persona
Decirle al jefe que no puedes trabajar con una persona en concreto porque no te llevas bien con ella puede resultar contraproducente. El jefe espera que los trabajadores sean capaces de superar los conflictos personales y encontrar la manera de trabajar en equipo. No es necesario ser amigos para trabajar juntos. [/multipage]
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11. Hablar mal de los compañeros
Hablar mal de los compañeros ante el jefe es algo que no debes hacer nunca. Es una regla de oro que todos debemos aprender y respetar, ya que no solo te dejará en mal lugar, sino que puede hacer pensar al jefe que tenemos conflictos con otros trabajadores. [/multipage]
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12. ¿Puedo hablar con su supervisor?
A menos que tengas decidido de manera firme que vas a dejar el trabajo no conviene desafiar a los superiores con frases de este tipo. Intentar pasar por encima de uno de nuestros jefes pidiendo hablar directamente con su supervisor puede hacernos un flaco favor. [/multipage]
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13. Es mi hora
Es cierto que los horarios están para cumplirse y que todos queremos disfrutar de nuestro tiempo libre y ocio, pero en ocasiones un pequeño esfuerzo puede verse recompensado. Si de entrada dejamos el trabajo sin hacer porque es nuestra hora no daremos la imagen esperada ante el jefe o superiores. [/multipage]
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14. Yo no tengo la solución
Quizá no tengas la solución, pero si aportas tu visión o tu teoría sí puedes hacer que en equipo se encuentren alternativas y se superen retos laborales. Decir frases como ésta, sobre todo delante del jefe, puede hacer que piense que no tenemos seguridad y confianza en nosotros. [/multipage]
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15. ¿Por qué no tengo lo de los demás?
Olvídate de favoritismo, porque en un trabajo lo importante es demostrar tu valía, tus dotes profesionales y tus habilidades, más allá de lo que hagan los demás por llegar a la meta más rápido o utilizando estratagemas poco éticos. Céntrate en lo constructivo. [/multipage]
