Si buscas mascotas, los pequeños roedores son una alternativa a la falta de espacio en casa. Los roedores, como un hámster, un conejo o una cobaya, son inteligentes, dóciles y juguetones. Además, estos pequeños mamíferos son muy resistentes a las enfermedades y no requieren tantas atenciones como otras mascotas más grandes, como por ejemplo, los perros. Te damos una serie de consejos sobre estas mascotas para que decidas si te llevas una a casa.
Los roedores son una buena compañía si buscamos una mascota pequeña. Son inteligentes y capaces de aprender una serie de habilidades. Estos mamíferos no necesitan que los bañemos o cepillemos, ni que los saquemos de paseo como con otras mascotas de mayor tamaño. Al igual que los gatos, los roedores cuidan de su higiene lamiéndose constantemente el pelaje.
Si hay que crearles un hábitat adecuado. La jaula deberá ser lo suficientemente grande para que pueda moverse, y contar lo necesario para su mantenimiento y desarrollo: una caja para cobijarse cuando quiera dormir y una rueda de ejercicios, ya que tienen mucha actividad. Cubre el suelo de la jaula con algún tipo de material absorbente, como virutas de madera o heno seco.
Recuerda que es importante cerrar bien la jaula, ya que son capaces de abrirla. Es aconsejable limpiar la jaula, y cambiar el pienso, al menos una vez a la semana. Si le damos alimentos frescos, retíralos al día siguiente si no se los ha comido.
También es importante ponerles en la jaula algo para roer, como un trozo de pan duro, ya que los incisivos de los roedores no dejan de crecer. Si ves que los tiene muy largos, llévalo al veterinario para que se los lime.
Si te decantas por una pareja de roedores, ten en cuenta que se reproducen con facilidad, pudiendo tener camadas de hasta diez crías.
¿Te gustan los animales? Si optas por otro tipo de mascotas, un cachorro en casa te exigirá mayor responsabilidad y cuidados. Además, también debes tener en cuenta las dificultades de viajar con mascota cuando se trata de especies más grandes.
