El próximo fin de semana tus amigos llegarán a tu casa esperando una cena deliciosa, divertida y con la que disfrutar en compañía. Si tus amigos son tan fanáticos culinarios como tú, seguro que se impresionarán con una deliciosa cena llena de platillos diferentes. Para ayudarte, no te pierdas estas recetas étnicas pensadas especialmente para cenas informales. ¡Toma nota!
Brochetas de pollo tandoori
El pollo es una opción con la que es difícil equivocarse, pues suele ser más sencillo de cocinar que otros ingredientes. Si quieres desempolvar el brasero, es hora de que aprendas esta receta tradicional del este de Asia con un toque especial, en brochetas.
Ingredientes:
- 2 pechugas de pollo enteras cortadas en dados (la cantidad dependerá de tus invitados)
- 2 cebollas
- 1 cucharada de jugo de carne
- Zumo de 1 lima
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Orégano
- Palillos de brocheta
Para el tandoori:
- 1 cucharada de cúrcuma
- 1 cucharadita de comino en polvo
- 1 cucharada de ajo en polvo
- 2 cucharadas de pimentón
- 1 cucharada de pimienta
- 2 cayenas molidas
- 1 cucharada de jengibre en polvo
- 2 yogures naturales sin azúcar
Preparación:
Primero prepara el curry o la mezcla de especias. Para ello, tuesta ligeramente las especias, hasta que saquen su olor (sin quemar). Añádelas a una mezcla en un bol de los dos yogures, un chorrito de aceite de oliva y una pizca de sal. Remueve bien hasta que forme una pasta bien integrada.
Sazona el pollo y úntalo con la mezcla tandoori. Deja macerar al menos una hora. Una vez que los jugos del tandoori hayan reposado en el pollo, haz las brochetas con palillos y ásalas bien en el asador o barbacoa, o si no tienes, en una sartén.
Para acompañar las brochetas pica cebolla en juliana y póchalas a fuego fuerte con un poco de aceite. A mitad de la cocción añade orégano picado, el jugo de una lima y las dos cucharadas de jugo de carne y saltea por unos breves minutos.
¡Un plato delicioso que a tus amigos les encantará!
Tabulé libanés
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Si quieres dar un toque de frescor a la mesa, con esta ensalada árabe quedarás genial entre tus amigos, ya que ofrece aromas y sabores muy especiales. Además, es apta para vegetarianos. ¡Apunta los ingredientes!
Ingredientes:
- 1 taza de Bulgur o sémola de trigo (si no encuentras, también puedes hacerlo con quinoa)
- 2 tazas de perejil
- 1 taza de hierbabuena fresca
- ½ kilogramo de tomates
- 3 cebolletas
- ½ taza de zumo de limón recién exprimido
- Sal
- Pimienta (opcional)
- 2-3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Preparación:
Pon a remojar el bulgur o la sémola de trigo en un recipiente con agua limpia durante unos 10 minutos. Mientras tanto, pica finamente las cebolletas. lava el perejil y la hierbabuena y pícalo en tiras finas. Corta los tomates en cubos pequeños. Mezcla las verduras en un bol de ensalada.
Escurre la sémola de trigo en un colador, exprimiendo todo el agua posible con una cuchara. Una vez que no quede exceso de agua, incorpórala al bol de ensalada y mezcla con el resto de ingredientes.
Añade el limón, aceite de oliva, sal y pimienta al gusto. Puedes servir el tabulé como entrante o como ensalada para acompañar el plato principal. Incluye una hojas de lechuga fresca a modo de cuchara para comerlo de forma diferente.
Guacamole mexicano
No hay nada como un buen guacamole mexicano como aperitivo para acompañar una buena velada entre amigos. Hacerlo es muy sencillo si sigues estos pasos.
Ingredientes:
- 3 aguacates maduros
- Jugo de lima (1-3 limas, dependiendo de su tamaño y la cantidad de jugo que tengan)
- Sal
- Unas ramita de cilantro (solo necesitarás las hojas, un puñadito)
- 1 Tomate
- 1/4 de cebolla morada
- Chile jalapeño
Preparación:
Pica finamente la cebolla, las hojas de cilantro y el tomate. En realidad, un guacamole puede ir al gusto de quien lo prepara. Echarle más o menos tomate, cebolla o cilantro depende de cada uno.
Abre los aguacates por la mitad, sácalos con una cuchara y machácalos con un tenedor dentro de un bol, hasta que forme una consistencia homogénea. Introduce el tomate, la cebolla y el cilantro e integra bien. Puedes ir añadiéndolo poco a poco para controlar la cantidad y el gusto.
Añade el jugo de las limas y la sal. Un buen guacamole debe estar saladito y ácido, así que no te pases, pero tampoco te quedes corta de sal y limón.
Por último, si quieres darle un toque picante, pica finamente el chile jalapeño (antes quítale las semillas) e incorpóralo al guacamole.
Para que no se oxide, deja dentro del bol al menos una de las semillas del aguacate, hasta el momento de servir. esto ayudará a que tu guacamole permanezca verde por más tiempo. Sírvelo con totopos o tortillas de maíz fritas (las encuentras en el supermercado).
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