La piel de los recién nacidos es dedicada y sensible, lo que hace que pueda ser vulnerable a padecer problemas como enrojecimiento, eritema, dermatitis o la presencia de vesícula y pequeños ampollas. Incluso la piel seca es un trastorno muy común entre los niños durante los primeros meses de vida. Esto es debido a que en los bebés la glándulas encargadas de generar las sustancias lubricantes naturales de la piel no han terminado de desarrollarse. También hay que revisar si los productos de higiene del bebé que estamos utilizando son los adecuados para su piel, ya que pueden resultar muy fuertes.
¿Cuál es el mejor remedio para la piel seca? Vamos a ver los remedios naturales con los que podemos mitigar los problemas más comunes que afectan a la piel de los más pequeños.
Causas y soluciones En general, las zonas del cuerpo del recién nacido más propensas a la sequedad son las manos, las rodillas, los codos, pero también puede afectar a la cara. En este caso además existe el riesgo de que la piel se vuelva ligeramente escamosa, con tendencia a agrietarse. En la mayoría de los casos, este problema está causado por el uso de jabones o productos de higienes demasiado agresivos. No sólo el gel, sino también el jabón de las manos puede irritar y sensibilizar la piel. Por esta razón, se recomienda, en primer lugar, evitar los productos demasiado fuertes (incluso en el olor).
Otro consejo a seguir es evitar el contacto de la piel del bebé con prendas de lana o fibra sintética. Es mejor que la ropita del bebé sea de algodón, una fibra natural que protege la piel y evita la picazón y el enrojecimiento. No obstante, cuando al contacto con este tipo de tejidos si se produjera una reacción fuerte de la piel hay que valorar que puede existir una alergia.
Entre las causas que provocan sequedad de la piel en los bebés también está la hidratación. Los líquidos también son fundamentales para mantener la piel hidratada en el recién nacido. Para esto, es aconsejable que el bebé a lo largo del día, además de la leche, tome agua o un té de hierbas (como el hinojo, que también ayuda a prevenir y resolver los cólicos).
Para prevenir y tratar la piel seca en los recién nacidos es importante para hidratar con productos específicos. Lógicamente, lo aconsejable es elegir aceites y cremas hechas específicamente para los niños. Sobre todo en los primeros días de vida del recién nacido la piel puede aparecer agrietada. Esto es debido a que muchas zonas de la piel están comprometidas en la posición fetal que toma el bebé en el vientre. Con las soluciones anteriores, la piel adquiere gradualmente su suavidad natural y su correcta hidratación. Si, por el contrario, la piel sigue demasiado seca, roja, con ampollas o burbujas, es mejor consultar al pediatra, ya que podría tratarse de alguna patología que requiere tratamiento específico, como dermatitis (incluyendo la conocida como dermatitis pañal) o dermatitis atópica.
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