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La modelo de 27 años Alexandra Sereda ha denunciado una brutal paliza de su novio, el millonario ruso Pavel Ushanov, de 33 años, que le ha provocado que tenga el rostro totalmente desfigurado, tal y como se puede comprobar en una foto que ella misma ha subido al Facebook. En estos momentos, su novio se encuentra en busca y captura tras la salvaje agresión. Según la joven, el hombre la apaleó en su propia casa después de que le manifestara su intención de poner fin a la relación que habían mantenido durante los últimos dos años.
Escalofriante, horrendo, repulsivo, salvaje…los adjetivos se quedan cortos para describir la situación que está viviendo la modelo rusa Alexandra Sereda, que ha denunciado una brutal paliza de su novio millonario Pavel Ushanov.
Todo ocurrió el pasado 21 de marzo, cuando ella, de 27 años, estaba saliendo de su casa para ir a trabajar como cualquier otro día. Fue entonces cuando el empresario llamó a su puerta.Al principio, y suponemos que ya con miedo, se negó a abrirle, aunque finalmente aceptó «cansada de oír sus gritos». Mal hecho, porque en ese momento la modelo ya tendría que haber llamado a la policía.Así, el joven entró en la vivienda, la tiró al suelo y comenzó a golpearla. La paliza se prolongó durante al menos diez minutos. «Le grite que me iba a matar y el me contesto: ‘Eso es lo que quiero'». Finalmente, la joven logró escapar y avisar a la policía. Por su parte, el agresor huyo sin que las autoridades hayan logrado localizar hasta el momento su paradero.
Y como una imagen vale más que mil palabras. Sereda quiso demostrar la agresión a la que fue sometida y creó una cuenta en la red social en Facebook en la que ha colgado fotografías suyas antes y después de la paliza. «Al ver mi imagen cuando llegué al hospital sentí que parecía un zombi de una película de terror», asegura la joven. La imagen es dramática, y se puede comprobar como la modelo ha estado a punto de perder la vida.
Hechos como estos no pueden pasarse por alto. Y ahora solo se espera que la modelo se pueda recuperar de esta agresión y seguir trabajando. Por su parte, su novio, y una de las personas más influyentes en Rusia, se encuentra en busca y captura. Solo la Justicia puede pararle los pies.
