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Belén Ordoñez: familiares y amigos acuden a darle el último adiós. Ayer a mediodía nos enterábamos de una triste noticia, el fallecimiento de Belén Ordoñez, hermana de la eterna Carmina y tía de los toreros Francisco y Cayetano Rivera. Lo cierto es que llevaba varios meses enferma, debido a un enfisema pulmonar que había hecho que pasara sus últimos días en la clínica de El Viso, donde estaba cuidada en todo momento. La que no ha podido asistir por estar destrozada en estos duros momentos, ha sido la hija de la fallecida, Belencita, que se había despedido de su madre el día anterior.
Ayer sobre el mediodía y a través del Programa del Verano de Telecinco, conocíamos la triste noticia del fallecimiento de Belén Ordoñez, la hermana de Carmina Ordoñez, debido a una enfermedad crónica que se la llevaba con 56 años de edad, los cuales había cumplido hace tan sólo unos días.
Un enfisema pulmonar se la ha terminado llevando, tras varios meses de lucha, por lo que sus últimos días los ha pasado en la clínica El Viso, donde ha estado cuidada en todo momento. Belén falleció en la madrugada del jueves al viernes, pero la mayoría de los allegados no conocieron la noticia hasta la mañana siguiente.
Una vez trasladados los restos mortales al Tanatorio de la Paz de Tres Cantos, empezaron a llegar familiares y amigos que quisieron mostrar sus condolencias y dar el último adiós a Belén, que fue incinerada pasada la medianoche.
Los primeros en llegar fue su sobrino Cayetano Rivera, acompañado en todo momento por su novia, Eva González, que iba con la mirada perdida hasta que se fundió en un emotivo abrazo con las primas de su madre, que lo esperaban para entrar al tanatorio. Las únicas declaraciones vinieron de sus primas, que además de dar las gracias por la presencia de la prensa, quisieron aclarar que Belén se “había ido tranquila”.
Poco antes de las seis de la tarde llegaba a Tres Cantos el otro hijo de Carmina Ordoñez, Francisco Rivera, acompañado de su novia Lourdes Montes, con la que se dice que tiene intención de casarse aunque su ex mujer, Eugenia Martínez de Irujo está retrasando los trámites para pedir la nulidad matrimonal.
Junto con Francisco, llegaba el otro sobrino de Belén Ordoñez, Julián Contreras Jr. junto con su padre, a pesar de que en los últimos tiempos no guardaba una estrecha relación con su tía, a diferencia de sus hermanos mayores que han cuidado en todo momento de la salud de la hermana de su madre, haciéndose cargo de todo lo que necesitara.
La gran ausencia ha venido de parte de la hija de la fallecida, Belencita, que no ha podido acudir al tanatorio por encontrarse destrozada y desolada, según han comentado las primas de Belén Ordoñez. Según ha comentado Ángela Portero en el programa de Telecinco, Sálvame, madre e hija se despidieron antes de ayer.
En cuanto a los amigos de la fallecida, muchos de ellos no se han podido desplazar a Tres Cantos por encontrarse de vacaciones y haber sido todo tan rápido, unido además a la huelga de Renfe, pero se espera que en el mes de septiembre se celebre una misa funeral. Una gran amiga de las dos hermanas, Lolita tenía una actuación en Marbella, por lo que no ha podido acudir pero la dedicó la canción “Pena, penita, pena” durante su concierto viviendo un emotivo momento. Además, en su cuenta de Twitter tuvo unas palabras de despedida para su gran amiga: “Esta noche estaré en el escenario de Starlite, mi pena también estará y mi cariño y mi dolor. Un beso, Belén Ordoñez. Te quiero”. Su hija, Elena Furiase utilizó el mismo medio para despedirse: «Mi más sentido pésame a la familia Ordóñez, que es como si fuera la mía. Belén y Carmen, ¡no os olvido! Madrina, ya estas acompañada».
Otra de las grandes ausencias ha sido la de la Duquesa de Alba, hasta el momento gran amiga de la familia, no hay que olvidar que tanto Francisco como Cayetano Rivera fueron de los pocos invitados en su boda con Alfonso Díez. Pero los últimos problemas entre el torero y su hija Eugenia, que también era gran amiga de Belén Ordoñez y que tampoco acudió al tanatorio, pueden ser uno de los motivos por los que no haya acudido a dar su pésame. Además, se encuentra estos días de vacaciones en Ibiza, donde ha llegado hacía tan sólo unas horas y otro viaje con sus años, podía resultar demasiado. Lo que sí ha querido es hacer unas declaraciones mientras se encontraba en el aeropuerto de la isla esperando a sus nietos: “Yo la quería mucho, era muy amiga mía, una mujer estupenda que echó su vida a perder».
Desde aquí queremos dar nuestro más sentido pésame a la familia y desear que Belén Ordoñez descanse en paz.
