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La cuenta atrás para Isabel Pantoja ha comenzado. Quedan pocos días para que entre en prisión y por eso la tonadillera quiere dejar todo atado. Será un buen tiempo alejada de su vida actual y por lo tanto quiere dejar todo controlado. Entre las cosas que tiene que hacer es buscar a alguien para el cuidado de su madre de 82 años. Además, le preocupa la vida que puede tener su hija Chabelita sin ella a su lado. Menos preocupada le tiene Kiko Rivera porque él ya sabe cuidarse solito.
La Audiencia Provincial de Málaga le ha dado un golpe casi definitivo a Isabel Pantoja. Su recurso no ha servido para nada y en los próximos días tendrá que entrar en prisión. Un mal trago por el cual ella quiere dejar todo atado antes de ingresar. Será un buen tiempo a la sombra y fuera tiene muchas cosas que controlar.
Uno de los aspectos que más le preocupa es la salud de su madre Ana, de 82 años y con un estado de salud muy delicado. A estas alturas nadie sabe si la matriarca del clan sabe que su hija ingresará en prisión, ya que ha vivido ajena a todo el proceso de las últimas semanas.
También en su menta está siempre presente su hija Chabelita. Con 18 años recién cumplidos se ha visto cómo quiere volar sola, pero está claro que no está capacitada. Ahora con un niño a la Pantoja le preocupa mucho qué puede pasar con ella.
Aunque se le nota muy afectado, Kiko Rivera es el que parece que más asumido lo tiene. Él seguirá refugiándose en su profesión de DJ y en su novia Irene para olvidar todos los problemas.
Ahora solo le queda estudiar la prisión en la cual cumplirá la condena. No hay nada claro y se barajan varias de ellas, aunque ya se han descartado la de Málaga, allí cumple prisión, Julián Muñoz y Alhaurín de la Torre, el mismo centro en el cual ingresó Mayte Zaldivar, para cumplir condena por la misma causa que la Pantoja. Será un momento duro, pero que la imprudencia y la avaricia ha provocado que la cantante se vea así.
