Dieta infancia: Alimentos para estimular el crecimiento. La alimentación juega un papel fundamental a lo largo de nuestra vida en la prevención de enfermedades, un protagonismo que se multiplica durante la etapa de la infancia y la pubertad. Algunos nutrientes son esenciales en la dieta de los más pequeños de la casa. Proteínas, hidratos de carbono, grasas insaturadas, vitaminas y minerales, a lo que hay que sumar el agua. ¿Cuál es el papel de cada uno de estos nutrientes y dónde podemos encontrarlos?
Proteínas, hidratos de carbono, vitaminas, minerales y grasas insaturadas forman parte de la familia de nutrientes esenciales en la dieta de los más pequeños de la casa. Las proteínas ayudan al crecimiento y no deben faltar en una dieta sana, variada y equilibrada. Alimentos como la carne de pollo o los huevos deben formar de su dieta.
Por su parte, los hidratos de carbono proporcionan la energía que necesita el cuerpo para mantenerse activo todo el día. Los más aconsejados son los hidratos de lenta absorción, presentes en los cereales integrales, legumbres y verduras. La fruta, azúcares rápidos, también es esencial. De hecho, la recomendación, como ya sabemos, es tomar cinco piezas de frutas y verduras al día.
Respecto a las grasas insaturadas, las encontraremos en los frutos secos, semillas y el aceite de oliva, un alimento esencial en la dieta tanto de los adultos como de los más pequeños por sus innumerables y reconocidas propiedades para nuestra salud.
Las vitaminas, por su parte, son indispensables para el organismo. Desempeñan múltiples funciones, como nutrientes esenciales que son. Entre otros, no deben faltar en la dieta de los niños los alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos. Otra vitamina esencial es la vitamina A, presente en las verduras frescas. Por su parte, el aceite de oliva es fuente de vitamina E, y las carnes, leche y yogures aportan vitaminas del grupo B. El huevo y el pescado, otro de los alimentos fundamentales en una dieta equilibrada, son una fuente idónea de vitamina D.
Los minerales son imprescindibles para un crecimiento sano. Minerales como el calcio, hierro y fósforo no pueden faltar en la dieta de los más pequeños para estimular su desarrollo y, sobre todo, que crezcan sanos y fuertes.
La hidratación es el complemento de la alimentación. Una correcta hidratación pasa por tomar entre 1,5 y 2 litros de líquidos al día, sobre todo agua.
Niños: ¿Hay que evitar el picoteo?
Es normal que los niños calmen su exceso de energía recurriendo a la comida. Si el tentempié que toman a media mañana, media tarde o, incluso, antes de irse a la cama, no es suficiente para saciar su apetito y evitar picar entre horas, es aconsejable dejar que lo hagan, pero con moderación y solo tomando alimentos sanos. Así, por ejemplo, el picoteo será saludable si toman fruta fresca, frutos secos o una zanahoria. Respecto a las frutas y verduras, la recomendación es tomar cinco piezas al día, mientras que los frutos secos, entre otras propiedades, mejoran la agilidad mental y ayudan a la concentración, gracias a su contenido en proteínas, grasas esenciales, vitaminas del grupo B, fósforo y hierro.
