Cuidados parquet: mantenimiento de los diferentes tipos. A la hora de elegir el suelo que vamos a poner en nuestra casa siempre nos entran las mismas dudas: ¿cómo se limpia este material? ¿es muy sucio? ¿es muy costoso sacar las manchas? Cada vez hay más materiales y cada vez son más sufridos, en los que las manchas se notan mucho menos, así como más sencilla su limpieza, sin necesidad de ser una esclava de la limpieza y mantener unos suelos perfectos siempre. Sin embargo, uno de los tipos de suelo más bonitos es y seguirá siendo el parquet, pero ¿cómo lo limpiamos? Para este tipo de suelos hay que tener mucho más cuidado que para el resto. Te contamos como mantenerlo con brillo y cuidado durante más tiempo.
La decoración es todo un arte, y muchísimas personas tienes muchos problemas porque no saben o no se sienten capaces de decorar su hogar como les gustaría. Bien porque no se atreven a dar el paso para comprar un determinado mueble, una determinada lámpara para el salón o cómo amueblar la cocina.
Para todas aquellas personas que tengan problemas o quieran encontrar un persona especialista y que les asesore, no hay mejor formar de hacerlo que contratando a un interiorista, que además de darte las mejores opciones según tus gustos te asesorará con los nuevos productos, materiales y tipos de decoración.
Para el suelo hay todo un mundo de posibilidades, y cada vez es más grande, sobre todo con materiales más resistentes, menos sucios, con una dureza mayor para evitar rayones, etc.
Dentro de los materiales más utilizados, el rey de los suelos ha sido por mucho tiempo el parquet. Sin embargo, este tipo de material es de los más delicados y requiere de diferentes tratamientos para su conservación como el primer día y que así mantenga su brillo en perfecto estado.
¿Cómo podemos cuidar el parquet si es sintético o flotante?
- Parquet sintético. Es una de las opciones más comunes actualmente ya que está elaborado con fibras que imitan a la perfección a la madera natural. Además este tipo de parquet es mucho más barato y resistente. Este tipo de suelo basta con limpiarlo diariamente a través de una mopa ligeramente húmeda. No se recomienda la utilización de cera. En el caso de que se derrame cualquier tipo de líquido en él, es preciso recogerlo de inmediato, de esta forma evitaremos manchas en el mismo.
- Parquet flotante. Es un gran aislante térmico y acústico. No es recomendable utilizar productos con componentes ácidos, con ceras, siliconas o con componentes agresivos ya que posteriormente le restarán brillo. Para fregar los suelos basta con verter en un cubo con agua un chorrito de vinagre para desinfectar y mantener el brillo. Lo pasaremos por el mismo pero con el trapo muy retorcido, que no deje humedad.
¿Y cómo lo hago con el parquet natural?
Sin duda es el más bonito de todos y por supuesto, el más natural. En este caso sí hay que tener mayores cuidados que en los casos anteriores. Por un lado hay que recordar que el exceso de humedad puede levantar el parquet así como producir manchas en el mismo. Por el contrario un exceso de sequedad hace que el parquet se agriete, lo que es conveniente tener un humidificador cerca.
Puesto que el parquet natural es mucho más delicado, deberíamos evitar en la medida de lo posible caminar sobre él con el calzado de calle que contiene piedrecitas y/o barro que rayará la madera.
Los rayones son muy comunes en este tipo de suelo por lo que hay que evitarlo en la medida de lo posible. Además de lo anterior, los muebles como sillas o mesas deberían tener tiras de fieltro que eviten los arañazos al desplazarlos de lugar.
Aunque pensamos que la cera es indispensable para el parquet hay que tener mucho cuidado con ella ya que puede terminar deteriorando la madera. Lo mejor para su desinfección y la conservación del suelo es limpiarlo con agua y vinagre, evitando siempre que quede demasiada humedad.
Además de todo lo anterior, para limpiar el suelo y eliminar el polvo y otras sustancias lo ideal es pasar el aspirador o la mopa, ya que si utilizamos la escoba tradicional se pueden producir rayones.
