Cáncer de mama: El mapa de las diez enfermedades del tumor. Es uno de los tumores femeninos más frecuentes, pero también uno de los que cuenta con mayor porcentaje de supervivencia, gracias a los continuos avances en medicina y tratamiento de los tumores. Y precisamente, uno de los últimos hallazgos sobre la genética de este tipo de cáncer, abre la puerta a la investigación sobre tratamientos más personalizados, más específicos y, por tanto, más eficaces aún para combatir un tumor que representa el 16% de los cánceres femeninos en el mundo.
Ganar la batalla al cáncer de mama es posible, uno de los tumores más frecuentes, con 44 diagnósticos al día en nuestro país, según datos médicos. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que representa el 16% del total de diagnósticos de cánceres femeninos del mundo. La detección precoz, y esto siempre conviene recordarlo, juega un papel esencial en el diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama, en la misma medida que los continuos avances de la medicina y la investigación, como las respuestas encontradas al examinar y estudiar el mapa genético de este tipo de tumor. Y es que no se trata de una enfermedad, sino de diez enfermedades distintas. Es decir, el cáncer de mama se puede dividir en diez subtipos. Un nuevo mapa que viene avalado por el Instituto de Investigación del Cáncer de Reino Unido, y que aporta otras interesantes herramientas para el tratamiento del cáncer, como la identificación de varios genes directamente ligados a este tumor. El estudio ha desgranado su anatomía molecular y abre nuevas puertas para a la investigación no solo de potenciales nuevos fármacos, sino también de tratamientos más personalizados e individualizados, uno de los retos de la medicina en el campo de la oncología.
Los estudios realizados hasta ahora se han basado en el análisis de más de dos mil muestras de mujeres diagnosticadas de cáncer de mama, analizando tanto el ADN como el ARN (ADN en proteínas). El análisis permitió identificar a los oncogenes y a los genes supresores de tumores (éstos últimos tienen la función de proteger contra la enfermedad). A partir de la actividad genética se puede clasificar el tumor en diez tipos nuevos (InClust 1 a 10). Hasta ahora los test se basan en detectar la presencia de biomarcadores (receptores de estrógeno, por ejemplo). Es decir, el nuevo mapa del cáncer de mama está formado por diez categorías, diez tipos de cáncer de mama en función de los genes que estén activados, lo que permitirá mejorar el tratamiento al adaptar los fármacos al tipo preciso de cáncer de mama de una manera mucho más precisa y eficaz.
La mayoría de los tumores, más del 70%, debe responder a los tratamientos hormonales. Sin embargo, como señalan los especialistas, la reacción varía mucho, por lo que se hace necesario indagar más para buscar una clasificación del cáncer de mama más precisa y que allane el camino en el diagnóstico lo máximo posible.
Cáncer de mama: Diagnóstico precoz
Tal y como hemos señalado, el cáncer de mama representa el 16% del total de tumores femeninos diagnosticados en el mundo. Pero es que además su prevalencia sigue en aumento, ya que los diagnósticos de cáncer mamario se han duplicado en las últimas tres décadas, según datos del Instituto de Métrica y Evaluación de la Salud de Estados Unidos. En nuestro país, las cifras también hablan por sí solas, con más de cuarenta diagnósticos al día. Para prevenir y aumentar las probabilidades de curación, la detección precoz es fundamental, así como el cuidado de nuestras mamas. De hecho, las mujeres podemos hacer mucho por prevenir las alteraciones de las mamas, a través de la autoexploración y acudiendo a las revisiones ginecológicas de manera periódica. Las mamas constituyen una parte del cuerpo siempre presente en la vida de la mujer, las cuales cumple una función esencial en las diferentes etapas.