Día Internacional de la Mujer 2012: La salud también nos diferencia. No solo nuestros rasgos de personalidad y nuestras inquietudes nos hacen diferentes, sino también las cuestiones relacionadas con la salud en cada unan de las etapas de la vida, desde las enfermedades o trastornos que más nos afectan a los motivos que nos llevan, por ejemplo, a no dejar de fumar. Un Día de la Mujer donde la salud nos preocupa y nos ocupa, porque algunos temas directamente relacionados con la mujer están de máxima actualidad, y en el que también hay nombres propios, como el de primera mujer académica de las ciencias, Margarita Salas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no sólo la ausencia de enfermedad o dolencia”. Atendiendo a esta definición, la salud comprende factores biológicos, psicológicos, sociales, culturales, demográficos y económicos, en la medida en que todos actúan como condicionantes del bienestar. Aunque hombres y mujeres compartimos la preocupación por la salud, no así los problemas, específicos de la mujer, como los trastornos asociados a la etapa de la menopausia o determinados tipos de tumores, como el cáncer de mama o de útero. Las mujeres además somos más propensas a padecer determinadas dolencias, como las migrañas o la urticaria, o trastornos más severos como la fibromialgia y las enfermedades cardiovasculares. Así, según datos de la Sociedad Española de Cardiología, es la causa de muerte de más de 65.000 mujeres al año en nuestro país, un 8% más que en el caso de los hombres. Incluso los infartos se manifiestan de manera diferente en hombres y mujeres, ya que en este caso pueden no notar dolor en el pecho, pero sí sudoración, mareos y ardores en la zona superior del abdomen.
La maternidad y la salud reproductiva también nos hace diferentes, una etapa de la vida que, por cierto, las mujeres cada vez retrasamos más. Y no solo la salud física, también la mental, porque las mujeres somos más propensas a padecer episodios de ansiedad, problemas de insomnio o trastornos depresivos, mientras que los trastornos adictivos y de personalidad son de mayor prevalencia en hombres. La sobrecarga de trabajo o las dificultades para conciliar vida familiar y laboral suele ser, en el caso de las mujeres, uno de los detonantes del estrés entre los 35 y los 55 años.
Las responsabilidades laborales o familiares pueden influir en el estado de salud, de la misma manera que los hábitos de vida tales como el consumo de tabaco y de alcohol, práctica de ejercicio físico, dieta y medicación, porque las mujeres tendemos más a tomar fármacos e, incluso, a automedicarnos. Curiosamente, uno de los motivos esgrimidos para que una mujer fume o, al menos, no intente o se plantee dejar este hábito, es el peso, es decir, la preocupación de ganar peso (debido a que la nicotina inhibe el apetito) después de dejar de fumar es lo que hace que muchas de ellas ni siquiera lo intenten.
En cuanto al estilo de vida, el sedentarismo es más habitual entre las mujeres que en los hombres, falta de ejercicio directamente relacionada con los problemas de obesidad.
Las cuestiones de salud también están presentes en este Día de la Mujer 2012, con el protagonismo del debate abierto por la futura Ley del Aborto que el Ministerio de Justicia está elaborando. Pero hay más. Como decíamos al principio en este día también hay nombres propios relacionados con la salud y con la ciencia, como el de Margarita Salas, la primera mujer académica de la Real Academia de Ciencias Físicas y Naturales y la primera española en ser nombrada miembro de la prestigiosa Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. Salas recibirá hoy el premio Clara Campoamor por su aportación en la consecución de la igualdad entre las mujeres y los hombres en un campo tan importancia como la ciencia y la investigación.
