La celulitis es una de nuestras peores enemigas, y es que bastan unos meses de despiste para que aparezca. Afortunadamente contamos con muchas cremas para reducirla y trucos caseros para disimularla, e incluso la comida es nuestra aliada en este terreno. Sin embargo, no siempre podemos eliminarla por completo y tenemos que recurrir a tratamientos específicos. Una de las nuevas terapias más efectivas para eliminar la celulitis son las ondas acústicas o de choque. ¡Te contamos todo sobre ellas!
¿Qué son?
Las ondas acústicas o de choque son una de las energías que han demostrado ser más efectivas para combatir y eliminar la celulitis. Se trata de un procedimiento por el cual unas ondas acústicas de pulso único se transmiten en forma de vibraciones o impulsos para llegar a todas las capas de la piel y, en concreto, al origen mismo del problema.
Este tratamiento no es totalmente nuevo, sino que se ha utilizado durante muchos años en el ámbito médico para tratar ciertos problemas de salud, especialmente en los campos de la cardiología, dermatología y urología. No obstante, con el tiempo se dieron cuenta de que estas ondas no sólo eran capaces de mejorar la salud del paciente, sino que también mejoraba el estado y la textura de la piel. Esto ha hecho que se convirtiera en una de las opciones más fiables. Puede utilizarse en todas las partes del cuerpo, especialmente en zonas más conflictivas como los muslos, las caderas y las nalgas, e incluso es apropiado para recuperarnos después del embarazo.
Tipos de ondas
Durante todo el proceso se utilizan tres tipos diferentes de ondas acústicas para hacer desaparecer el exceso de grasa y la piel de naranja.
• Ondas de choque focales planares: Son ondas acústicas con una gran cantidad de energía que llegan hasta las capas más profundas de la piel. Su finalidad es que la grasa acumulada vaya desprendiéndose.
• Ondas de presión radiales: Se encargan de alisar la musculatura, por lo que se necesita una menor cantidad de energía.
• Vibraciones de alta frecuencia: Provocan reflejos de estiramiento con una frecuencia de 35 veces por segundo, lo que consigue contraer el músculo y mejorar el aspecto de la piel.
El tratamiento comienza con las ondas que menos energía presentan para comprobar la resistencia de tu piel sin que corras riesgo de que te aparezca algún hematoma, y poco a poco va subiéndose la intensidad.
Duración
Esta terapia se compone de unas 10 sesiones aproximadamente, aunque depende del caso en concreto. Por lo general, cada una de ellas dura entre 20 y 30 minutos y no requiere de ningún cuidado adicional.
Ventajas
Como ya hemos dicho, este tratamiento estaba localizado dentro de la medicina, por lo que además de eliminar la celulitis nos aportará una serie de beneficios. En primer lugar, mejora la circulación y el drenaje de la zona en cuestión gracias a las descargas de energía. Esto también hace que mejore el sistema linfático y muscular, lo que provoca que se favorezca la eliminación de grasa y residuos que podamos tener en nuestro cuerpo. Por último, se crea un nuevo colágeno para reafirmar la piel y hacerla más elástica. Sin duda, constituye una de las mejores alternativas para eliminar este problema estético.
¿Qué te ha parecido esta nueva terapia? Te recomendamos que también eches un vistazo a cómo eliminar la celulitis con yoga.
