Hay ciertas señales de alerta que nos indican que podemos estar ante un accidente cardiovascular y a las que debemos prestar atención. Dolor en el cuello y en el brazo izquierdo, sensación de falta de aire al realizar un esfuerzo, indigestión, ardor de estómago o dolor de mandíbula y oído son algunas de las señales que, aunque podamos asociarlas a otros problemas de salud también pueden ser la voz de alarma de nuestro organismo que nos indica que algo no va bien en nuestro corazón. Si notamos alguno de estos síntomas, conviene consultar al médico para confirmar la causa que está detrás.
Síntomas como dolor torácico –zona anterior del tórax, delante del corazón-, sensación de malestar general, sudoración y en ocasiones dolor en el cuello, espalda o brazo izquierdo pueden ser indicativos de una patología coronaria como la angina de pecho o el infarto agudo de miocardio. Al tratarse de síntomas que pueden estar asociados a otras patologías no siempre les prestamos la debida atención, pero conviene hacer caso a nuestro organismo y consultar al médico. Vamos a ver más detenidamente qué nos revelan las señales más comunes que nos envía nuestro organismo para hacernos saber que en nuestro corazón algo no funciona como debiera.
Dolor en el cuello y en brazo izquierdo
Aunque el síntoma más común en el infarto agudo de miocardio es el dolor en el pecho, en algunos casos se manifiesta con dolor en el cuello o en el brazo izquierdo. Si notamos un dolor intenso en el cuello o en el brazo izquierdo –no necesariamente en un punto determinado-, además de malestar general y sudoración, y los síntomas no remiten con analgésicos o cambiando de postura- conviene acudir al médico lo más rápido posible para descartar que sea un posible infarto.
Falta de aire
La sensación de falta de aire al realizar un esfuerzo (disnea de esfuerzo) puede estar causada por una obstrucción de las arterias coronarias (equivalente anginoso en términos médicos). No obstante, la disnea es un síntoma común de otras patologías como anemia, obesidad o enfermedad pulmonar. En lo relativo al corazón puede ser síntoma de patologías de las válvulas coronarias o de alteraciones del ritmo del corazón, entre otras. Cuando la sensación de falta de aire aparece tras realizar actividades tan cotidianas como subir las escaleras o pasear podemos estar ante una enfermedad de las arterias coronarias. La disnea es el resultado de la dificultad del miocardio de bombear la sangre ante una incorrecta oxigenación.
Problemas digestivos
Indigestión, ardor de estómago o náuseas pueden ser la primera señal de un infarto agudo de miocardio, síntomas que pueden aparecer sin el dolor típico en el tórax. El dolor de estómago o la indigestión sí suelen aparecer junto a malestar general y sudoración, siendo aconsejable consultar con el médico lo antes posible por si se tratara de un síndrome coronario agudo.
Dolor de oído y mandíbula
Los problemas del corazón también están asociados con dolor en la mandíbula, las encías y el oído. Las señales de dolor producidas por la isquemia miocárdica se irradian a las vértebras cervicales y de ahí a la mandíbula y al oído. En estos casos, también hay que consultar de manera urge al médico por si estuviéramos ante un episodio coronaria agudo.
