¿Sabías que la elección y uso de la ropa interior puede influir en tu salud física y sexual? No siempre somos conscientes, pero a buen seguro que si repasamos los errores más comunes con la ropa interior, al menos, habremos cometido alguno de ellos. Tendemos a elegir la ropa, no solo la interior, por las tendencias que marcan las modas, pero no todo lo que en apariencia resulta glamuroso y novedoso es bueno para la salud.
¿Cuáles son los errores que cometemos y que conviene corregir? Tal y como vamos a ver se trata de seguir unos sencillos consejos que evitarán las posibles consecuencias de elegir, por ejemplo, prendas interiores demasiado apretadas o excederse con el uso del tanga.
Ropa interior saludable
Para que tu ropa interior sea sinónimo de saludable estos son los errores que, como señalan los expertos, en algunos casos pueden estar detrás de molestias o trastornos de la salud inesperados. Identificarlos es esencial para evitarlos:
- El uso de ropa interior ajustada solo de manera puntual, no a diario porque la piel necesita sentirse más liberada. En el caso de las mujeres, la ropa interior demasiado apretada puede afectar a la lubricación vaginal, tanto en la etapa de la menopausia como si está tomando anticonceptivos hormonales. También aumenta el riesgo de irritación en la zona íntima. En el caso del hombre puede tener consecuencias sobre la salud de los testículos y afectar a la fertilidad.
- El tanga es cierto que es una prenda muy sensual, pero llenar el cajón de todos los colores y tamaños no es la mejor idea para tu salud, ya que como señalan los expertos en salud femenina la tira del tanga se convierte en un vehículo de fácil transmisión de bacterias, factor de riesgo de infecciones vaginales. Esto es debido a que resulta demasiado pequeña para cubrir la vagina.
- Usar ropa interior de licra o de seda de manera habitual y continua no es recomendable. La ropa interior, salvo para momentos puntuales, conviene que sea de un tejido que facilite la transpiración de la zona genital, siendo el algodón el más indicado.
- Es una regla básica, pero nunca está de más recordar algunas cosas como que, además de cambiarse de ropa interior todos los días, hay que hacerlo después de hacer ejercicio, por las mismas razones para no usar la ropa de deporte sucia, ya que estaremos a expensas de las bacterias.
- La ropa interior se debe lavar con un detergente sin perfume, y leer bien la etiqueta para identificar si contiene algún producto químico que pueda irritar la piel.
- Elegir la ropa interior sin costuras es una buena opción para evitar irritaciones, pero este consejo hay que hacerlo extensivo al resto de la ropa si eres de las que optas por no usar ropa interior.
- Y no te olvides, como ha constatado la ciencia, que dormir sin ropa es más saludable, ya que favorece la transpiración de la piel y de la zona genital.
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