Estreñimiento por estrés: Por qué aparece y cómo curarlo

El estreñimiento por estrés es un trastorno que constata la estrecha relación entre las emociones y el intestino, considerado por la ciencia como el segundo cerebro. Tensión nerviosa, ansiedad, las preocupaciones o los cambios de humor afectan directamente al sistema digestivo, aumentando las probabilidades de estreñimiento provocado por estrés.

No conviene subestimar el estreñimiento ocasional, sobre todo cuando va asociado a hábitos poco saludables, ya que corremos el riesgo de que se vuelva crónico. ¿Qué hacer para evitar el molesto estreñimiento causado por estrés? Prevenir y tratar está en tus manos.

Estreñimiento causado por estrés

¿Te puedes estreñir por estrés? Las emociones negativas son capaces de activar las hormonas del estrés y ralentizar el proceso digestivo y los movimientos del intestino, lo que altera la función intestinal y provoca el estreñimiento. Trastorno que cuando se agrava también puede causar diarrea por estrés.

El estrés suele desvelar hábitos poco saludables, desde llevar una dieta desequilibrada (comidas rápidas, alimentos grasos…) son un factores a una vida sedentaria, lo que agrava el estreñimiento.

¿Cómo combatir el estreñimiento por estrés?

Controlar el estrés y revisar ciertos hábitos cotidianos son claves para aliviar el estreñimiento.

Incorpora a tu alimentación más alimentos ricos en fibra, frutas y verduras, granos enteros y germinados y semillas de lino. De igual manera hay que cuidar la hidratación, aumentando la ingesta de agua (entre 1,5 y 2 litros de agua al día). Evitar los alimentos ricos en azúcar, bebidas alcohólicas y alimentos procesados.

El magnesio es un mineral esencial para la salud ya que, entre otras funciones, influye en el sistema nervioso y mitiga los estados de tensión y ansiedad. Al reducir el estrés, mejora de manera natural el movimiento intestinal.

Los suplementos de magnesio más recomendados, por su efecto laxante, son el cloruro de magnesio, carbonato de magnesio y citrato de magnesio.

El ejercicio físico es bueno para combatir el estrés y el estreñimiento. Una sencilla rutina matutina para empezar el día sin ansiedad, practicar ejercicios de yoga, dar un paseo o empezar a hacer running. Elige la modalidad deportiva que mejor se adapte a ti.

Reserva al menos 10 minutos al día para hacer algo relajante, desde tomarse una infusión relajante a poner en práctica algunas de las técnicas de mindfulness o meditación para relajarse. Para crear un ambiente relajante, acompaña el momento con una vela de lavanda.

La técnica Jin Shin Jyutsu es una milenaria forma de aliviar el estrés. También ayuda un suave masaje en el abdomen, para estimular el movimiento intestinal y los músculos. Un remedio casero es la arcilla para el estreñimiento, a la que se atribuye el efecto de ayudar a deshinchar el intestino y favorecer la eliminación de toxinas. Aplicamos la arcilla (roja) en el vientre, cubrimos con una tela y dejamos actuar durante toda la noche. Retirar con agua tibia.

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